Como parte del proyecto «Apoyo al Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica en el marco de la respuesta global de la Unión Europea al COVID-19», este lunes se instaló el Comité Directivo Nacional. El ente está conformado por la Unión Europea, el Gobierno de El Salvador, y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El proyecto, que inició en marzo de este año, busca mitigar el impacto de la crisis de la pandemia COVID-19 mejorando la resiliencia a largo plazo y la reducción de los flujos migratorios forzosos o irregulares entre la población participante.
La iniciativa beneficia a 12 municipios de San Miguel, 200 grupos de productores y 1,800 hogares, situados en el corredor seco, los cuales enfrentan retos por altos flujos de migración y situaciones climáticas.
La FAO informó que la función principal del Comité será guiar y supervisar la implementación de este proyecto, facilitar la complementariedad de recursos técnicos y financieros que contribuyan al logro de los resultados, y acordar las acciones de comunicación y coordinación que deban
Además, servirá para promover oportunidades rentables a los grupos de emprendedores beneficiarios del proyecto.
Diego Recalde, representante de FAO en El Salvador, comentó que la intervención que hace FAO en el país por el desarrollo sostenible y resiliente de productores se gesta con la articulación de diversos actores.
«El trabajo en conjunto garantiza una óptima ejecución y la obtención de mejores resultados. Como FAO desarrollamos una estrategia global para consolidar una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una mejor calidad de vida para todas y todos», expresó.
Asimismo, el proyecto incluye recursos no reembolsables para apoyar y financiar los emprendimientos rurales innovadores y rentables implementados por grupos asociativos.
Los organismos involucrados también buscan acompañar a los beneficiados en la elaboración de planes de negocios y de inversión.