A pesar de la evidente crisis y pocos funcionarios que aún quedan en el partido ARENA, su dirigente Carlos Saade se resiste a admitir el hundimiento de la estructura política que han provocado las numerosas renuncias de alcaldes y diputados.
Hasta el momento, 23 de 35 alcaldes areneros han desistido de continuar en las filas de dicho partido, y presentaron sus cartas de renuncia a Saade. La mayoría estas coincide en los motivos, relacionados a la falta de apoyo, compromiso y liderazgo en ARENA.
Sin embargo, para Saade esta situación solamente se trata de «un tema de coyuntura», y restó importancia a las deserciones que ha tenido su partido. «Los que quieran retirarse del partido adelante, ahí está la puerta abierta para que puedan irse», expresó el presidente del Consejo Ejecutivo Nacional (COENA).
La última renuncia que recibió fue la del alcalde de Ozatlán, en Usulután, quien había militado en ese partido durante 22 años, asegurando que la estructura partidaria ya no representa sus ideales, que busca trabajar por el desarrollo de los territorios y por la mejora de las áreas rurales.
Además, cuatro diputados tricolor en la Asamblea Legislativa han renunciado hasta ahora, haciendo perder al partido a casi 54,000 votantes.