Las 11 medidas económicas impulsadas por el Gobierno tras el impacto de la inflación generada por factores internacionales a inicios de 2022, como las secuelas de la pandemia COVID-19, la crisis de suministros y la guerra entre rusia y Ucrani, llevaron al país a presentar los niveles de inflación más bajos de Latinoamérica.
De acuerdo con el último dato proporcionado por el Banco Central de Reserva (BCR) a noviembre de 2022, la inflación en el país fue de 7.3 %.
Dichos resultados, según el economista y expresidente de este banco estatal en los gobiernos del FMLN, Carlos Acevedo, «se deben a las medidas aplicadas por el Gobierno como los distintos subsidios», que fueron aplicados a combustibles acompañados de otra serie de medidas en temas precios de alimentos.
Además, explicó que mientras los países de la región centroamericana cerraron 2022 con niveles inflacionarios superiores al 8 %, el país logró mantenerse en el rango del 7 %. «Cerramos el año con una inflación estimada del 7 %, en el resto de la región las tasas han andado entre 8 % y 8.5 %. La inflación en El Salvador está entre dos puntos porcentuales menor que el promedio regional», explicó.
El experto en economía también concuerda en que los niveles de inflación en el país se disparan dependiendo del contexto internacional como lo han reiterado en diferentes ocasiones funcionarios de Hacienda y Economía.
«La inflación nuestra es importada, no es que nuestros productores estén incrementando precios, sino que es un tema global, Estados Unidos y Europa han tenido las tasas de inflación más altas en los últimos 40 años», sentenció.
Sin embargo, Acevedo, señaló que estas afectaciones de la guerra a derivados del petróleo, insumos agrícolas, alimentos «es una variable que está empezando a ceder debido a las políticas monetarias contractivas de los bancos centrales» y ejemplificó con EE. UU., que llegó a una inflación del 9 % y bajó a un estimado del 6 % al cierre de 2022.
Recaudación fiscal
El experto también destacó otros aciertos económicos de la administración Bukele en materia económica, en este sentido, destacó los resultados positivos en recaudación fiscal, derivados de iniciativas como el Plan Antievasión y una serie de políticas públicas enfocadas en la reactivación económica.
«En 2021, El Salvador fue el país que más recaudó en Latinoamérica y creo que este año será lo mismo incluso ha logrado superar las metas de recaudación y eso ha sido a base de una buena fiscalización», admitió el exfuncionario.
Además, añadió que durante el pasado 2022 El Salvador tuvo una carga tributaria de más de 20 % del Producto Interno Bruto (PIB).
«Los datos últimos que tenemos indican que nuevamente en el año 2022, El Salvador tuvo una carga tributaria de más del 20 % del PIB, es decir el monto de la recaudación dividido entre el PIB nos daría el 20 %. 2021 fue el primer año (de la historia) que el país rompió esa cota del 20 %», afirmó Acevedo.
Para el economista estos datos son «una buena noticia porque a pesar a pesar que la situación económica en el país no ha sido tan bonancible, se ha logrado superar incluso las metas de recaudación y ha sido a base de una buena fiscalización».
La opinión de Acevedo en este tema, refuerza la afirmación del ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, quien en declaraciones recientes indicó que a «escala latinoamericana El Salvador es el país que más recauda en materia de impuestos debido al plan antievasión y el crecimiento económico apuntalado por una serie de políticas públicas», dijo.
Plan de seguridad
Otro de los factores que según Acevedo ha incidido positivamente en el dinamismo económico del país es el plan de seguridad impulsado por el Gobierno que, según sus palabras, ha llevado a la revitalización de negocios que eran acechados por el flagelo de la extorsión.
«En cuanto a las medidas de seguridad he escuchado de grandes empresarios de transporte y nivel más pequeño de gente que ha hecho inversiones para revitalizar negocios que no los hacían por el tema de extorsiones. Sin duda hay un efecto», detalló.
Sin embargo, el economista aclaró que a pesar que la seguridad es la clave del inicio para la reactivación de la economía salvadoreña, «la apuesta debe estar enfocada en la inversión en capital humano, tecnología, educación y reducción de la brecha digital con inversión en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)».