Pérez precisó en una conferencia de prensa virtual que el caso se detectó la semana anterior en el cantón Camilo Ponce, provincia de Azuay (sur), en una persona que viajó a Paraguay, país que se encuentra en alerta epidemiológica.
«Ya se han tomado todas las medidas respectivas en cuanto a fumigación para evitar los vectores y también de tratamiento y seguimiento de la persona, la cual está estable en su domicilio», indicó.
Añadió que «no hay el riesgo de contagio a otras personas», y aseguró que en Ecuador no hay casos autóctonos, es decir, transmitidos localmente.
La chikunguña es una enfermedad vírica transmitida a los seres humanos por la picadura de los mosquitos vectores «Aedes aegypti» y «Aedes albopictus», la cual se caracteriza por presentar fiebre alta, dolores de cabeza, musculares y principalmente dolores articulares que pueden volverse crónicos y en algunos casos causar incapacidad por varios años.
Pérez agregó que el Ministerio de Salud puso en marcha una estrategia nacional para evitar la transmisión de esta enfermedad con medidas preventivas y de control vectorial, así como la destrucción de criaderos de mosquitos vectores.
Este virus se detectó por primera vez en Ecuador en 2014 y su transmisión se produjo en varias zonas tropicales y subtropicales, donde existe la presencia de los mosquitos transmisores.
La última vez que se registraron casos de la enfermedad en Ecuador fue en 2020, de acuerdo con la cartera sanitaria.