Autoridades del Instituto Nacional de Salud (INS) prevén que a finales de este año se pueda secuenciar de manera autónoma el virus de la COVID-19, y otros agentes infecciosos a través de un Equipo de Secuenciación Masiva de tercera generación que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) donó a la institución.
La directora del INS, Xochitl Sandoval, detalló a «Diario El Salvador» que este equipamiento es importante para la vigilancia, ya que a través del INS y el Laboratorio Nacional de Salud Pública bajo la coordinación con el ministro de Salud, Francisco Alabi, y por mandato del presidente, Nayib Bukele, se busca mejorar en la capacidad de diagnóstico para brindar atención integral en salud para la población.
«Alrededor de noviembre de este año, el Laboratorio Nacional de Salud Pública estará secuenciando SARS-CoV2, y esto nos va a permitir establecer una plataforma para futuras colaboraciones de investigaciones, pero también para cooperar con la Dirección de Epidemiología [del Ministerio de Salud]. Entonces, si con la secuenciación estamos viendo la patogenicidad de un virus, podemos contribuir al diseño de vacunas, a eliminar la transmisión del virus tomando estrategias más adecuadas, y al diseño de fármacos», dijo Sandoval.
Indicó que, a través de estos procedimientos, también se podrá identificar genéticamente organismos como virus, bacterias, hongos y enfermedades producidas por el virus del dengue, zika, y chikungunya. Esto permitirá, de acuerdo con Sandoval, robustecer la capacidad de análisis de los laboratorios, principalmente del Laboratorio Nacional de Salud, además de brindar información para el Minsal y organismos internacionales.
Con la implementación de la secuenciación en el país, las muestras que, actualmente son enviadas al extranjero, serán procesadas por el INS para determinar las variantes de la COVID-19 que circulen en el territorio.
«Se podrá contribuir a informar de una forma adecuada para seleccionar futuras vacunas de acuerdo con las mutaciones que pueda tener un determinado virus, para realizar una vigilancia genómica viral sin depender del envío de muestras al extranjero como hasta ahora se ha hecho. Nosotros hemos secuenciado entre siete a 10 veces el SARS-CoV2, pero hemos dependido de los laboratorios internacionales», explicó la titular del INS.
Entre las proyecciones que se tienen con el equipo recibido están trabajar en la medicina de precisión y en proyectos de caracterización inmunogenética de tumores malignos en niños, cánceres de mama, cáncer colorectal, entre otros.
«En este quinquenio vamos a tener dos equipos de secuenciación masiva y probablemente otro tipo de tecnologías similares a la secuenciación, un poco menos compleja, con la técnica de nanoporo para ir al campo de trabajo a hacer la secuenciación», subrayó la doctora Sandoval.