El presidente del Registro Nacional de las Personas Naturales (RNPN), Fernando Velasco, aseguró ayer que la institución que preside está trabajando para que El Salvador tenga un padrón electoral confiable de cara a las elecciones generales del próximo año.
«Estamos haciendo un esfuerzo para tener un padrón electoral confiable. Ahora puedo asegurar que las instituciones estamos trabajando de forma articulada, y eso ha dado resultados positivos hasta la fecha», dijo Velasco durante la entrevista A:M, de Canal 10.
Junto al Ministerio de Relaciones Exteriores, la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) y el Tribunal Supremo Electoral (TSE), el RNPN ha firmado convenios que les permiten ejecutar acciones para el buen desarrollo de los comicios en 2024.
Cancillería y la DGME nutren de información al TSE sobre emisión de pasaportes, documento que se usará en el extranjero para emitir el sufragio, y el RNPN informa al organismo electoral sobre la emisión del Documento Único de Identidad (DUI), documento que se usará tanto para la votación nacional como desde el exterior.
Velasco detalló que hasta el pasado 3 de abril el RNPN ha transferido al TSE6,857,946 registros de DUI, como parte de la información que cada 15 días debe de enviar al organismo colegiado.
En tanto, Noel Orellana, magistrado del TSE, reiteró ayer que la venidera jornada electoral será transparente y garante de la secretividad del voto.
«Nuestro compromiso aquí es con nuestro país, con la democracia […] y con el respeto a la voluntad del soberano el día que vaya a emitir su voto», dijo.
De hecho, hoy se conocerá el listado de las empresas que mostraron interés para el diseño, desarrollo e implementación del voto en el exterior. Previamente, el tribunal electoral ha garantizado que el voto desde el extranjero será auditable, verificable, seguro, trazable y secreto, saliendo al paso de críticas sin fundamento que la oposición política ha expresado en diferentes espacios con el afán de deslegitimar el proceso.
Orellana señaló que, posterior a la contratación de la empresa que diseñará, desarrollará e implementará el voto de la diáspora, se tendrá que contratar a otras dos «firmas auditoras».
Una de estas fiscalizará la información que enviarán al TSE el RNPN, cancillería y la DGME, y que servirá para la elaboración del padrón electoral de los salvadoreños en el extranjero.
La otra «firma» será para que se audite el trabajo —desde el inicio de la votación hasta el escrutinio final— que desarrolle la empresa que implemente el voto en el extranjero.
«No hay lugar a que alguien pueda decir que se puede manipular [la votación] porque son tres empresas auditoras las que se van a contratar», afirmó.}