La marcada reducción de la migración irregular de salvadoreños hacia Estados Unidos fue reconocida como una «buena noticia» por parte del embajador estadounidense en El Salvador, William Duncan.
En medio de la incertidumbre por la finalización del Título 42, Duncan resaltó como una nota positiva que el país ha logrado atajar el fenómeno migratorio. Este viernes, con la expiración de la política de salud pública conocida como Título 42, la afluencia de migrantes que esperan obtener asilo en Estados Unidos se ha convertido en un punto de tensión.
«La buena noticia es que, hablando de El Salvador, hemos visto una reducción de casi 40 % de la cantidad de gente que está yendo a los Estados Unidos de manera irregular, comparando el año actual con el año pasado», mencionó el diplomático este viernes.
Las cifras del DHS comprueban que la afluencia de migrantes salvadoreños ha cedido en los últimos meses. Con exactitud, entre octubre de 2022 y marzo de 2023 se reportó una reducción del 38.16 % de los encuentros de salvadoreños de la frontera sur, en comparación del mismo periodo del año anterior También se logró reducir la migración de niños no acompañados.
«Es una noticia muy buena para todos, sobre todo para El Salvador porque su gente, que el país necesita, no tiene por qué arriesgarse en ese viaje», mencionó Duncan.
Desde este viernes, en la frontera estadounidense manda el Título 8. Bajo esta reglamentación migratoria, todas las personas que intenten ingresar a Estados Unidos de forma irregular estarán a merced de una deportación acelerada. Además, se les prohibirá la entrada por cinco años y podrían enfrentar una causa penal si reingresan sin la debida documentación.
Llegar a la frontera de forma irregular debe ser la última opción. Antes de esto, los migrantes deben haber agotado las vías legales que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) ha abierto junto al endurecimiento de las consecuencias para migrantes irregulares. Primero, deben haber solicitado asilo en un país de tránsito y haber sido rechazados. También, deberían intentar obtener una cita para asilo por medio de la aplicación CBP One.
Otra opción sería solicitar la calidad de refugiado en uno de los centros de procesamiento regionales, en Guatemala o Colombia.