La EMA recomendó el viernes el uso intradérmico (debajo de la capa superior de la piel) de la vacuna Imvanex contra la enfermedad, en lugar de como inyección subcutánea (debajo de la piel), con el objetivo de usar una dosis más pequeña y vacunar así a más personas.
Esta recomendación es una «medida temporal para proteger a las personas en riesgo durante el brote actual de viruela del mono mientras el suministro de la vacuna siga siendo limitado».
De esta manera, la Comisión de Salud Pública de España anunció que estudiará el próximo lunes si se comienza a administrar por vía intradérmica la vacuna contra la viruela del mono, confiando en multiplicar por cinco cada dosis actual.
Darias explicó que esta vía permitirá no solo incrementar el número de dosis, sino también que se puedan inocular dos dosis separadas por un plazo de 28 días para completar la pauta.
Con casi 6.000 casos confirmados, España tiene un total de 12.420 vacunas para tratar de atajar el brote que estalló a principios de mayo en países no endémicos.