El politólogo y conferencista argentino Agustín Laje destacó las medidas que el presidente de la República, Nayib Bukele, ha tomado en cuanto a la seguridad pública en El Salvador, las cuales están transformando al país en uno de los más seguros de América Latina, tras varias décadas siendo uno de los más afectados por la violencia en todo el continente.
Laje destacó que el presidente Bukele ha iniciado una guerra contra las pandillas y los grupos delincuenciales en el país, señalando que es una medida necesaria. Además, enfatizó en que el mandatario salvadoreño no se deja dominar por la presión de organismos internacionales en este aspecto.
«A nivel de seguridad interna (Bukele) está haciendo un buen trabajo. Está arrasando como se debe arrasar con los grupos delincuenciales organizados, que es con mano dura y sin dar vueltas. Acá hay dos paradigmas: o le permitimos al crimen organizado destrozar vidas inocentes o el Estado se pone al frente de una guerra interna contra los grupos armados organizados y los pasa por encima», comentó Laje durante una entrevista.
«A un delincuente de las maras o crimen organizado, que el Estado le pase por encima, me importa muy poco. A mí me importa las víctimas inocentes. Hemos llegado a una instancia que la izquierda nos ha llegado a hacer creer que los únicos que tienen derechos humanos son los delincuentes y no las víctimas», agregó.
En la misma línea, Laje señaló que Bukele ha demostrado valor al plantar cara frente a organismos internacionales que han intentado incidir en las decisiones de su gobierno, demostrando la soberanía de El Salvador como una nación independiente.
«Bukele también se le planta al globalismo. El Salvador es un país pequeño, pero que se le ha plantado a los organismos internacionales que lo han querido presionar. Bukele se les ha plantado. Eso también lo reivindico de él», destacó.
Laje es uno de los politólogos más importantes de América Latina y uno de los principales voceros contra agendes globalistas que van en favor de políticas como el aborto o el matrimonio igualitario. De igual forma, es uno de los principales críticos de los gobiernos en América que atentan contra el bienestar de la población y cometen prácticas de corrupción.