El sector farmacéutico se ha posicionado como uno de los más importantes del país gracias a una inversión de más de $100 millones en los últimos 12 años en remodelación de plantas, compra de maquinaria y capacitación de personal para cumplir con las buenas prácticas de manufactura.
La presidenta de la Asociación de Industriales Químico-Farmacéuticos de El Salvador (Inquifar), Carmen Estela Pérez, aseguró que gracias a este «golpe de timón» la industria farmacéutica del país ha logrado aumentar la competitividad, hasta convertirse en el tercero de mayor relevancia a escala regional.
«Esa inversión en el parque industrial farmacéutico ha hecho que el mercado en El Salvador no sea el único destino, sino que para poder tener un sano retorno a esas inversiones la exportación también ha crecido, en el Producto Interno Bruto industrial el sector representa un estimado del 5 %, el crecimiento es impulsado por el cumplimiento de la norma y el compromiso con la calidad del producto», afirmó.
De acuerdo con la líder de la gremial, Centroamérica es el mercado natural para la exportación de los productos nacionales, pero a este se suman países del Caribe y México, Estados Unidos, Colombia y otros mercados exploratorios como Argelia, otros países de África y Medio Oriente.
Por ejemplo, indicó que los farmacéuticos salvadoreños se han convertido en el cuarto proveedor para Honduras, el quinto para Nicaragua y el octavo para Guatemala.
«Esto nos ha permitido seguir avanzando, creciendo, consolidándonos, destacar en términos de la región, buscar un crecimiento sostenido y colaboración público privada. Estamos conscientes de que para elaborar los productos se necesita un compromiso con la calidad», destacó.
Asimismo, Pérez reveló que según datos de referencia de la Dirección Nacional de Medicamentos (DNA), El Salvador cuenta con los precios de medicamentos más bajos en Centroamérica, gracias a disposiciones legales e incremento en la producción.
Además, dijo que, a escala local, un estimado de un 30 % de la producción total lo compran las instituciones públicas y que se mantiene una relación de diálogo y apertura con el Gobierno.
«Privilegiamos el diálogo y el Gobierno ha sido abierto con nosotros, la industria es la más regulada en el mundo y debemos tener coordinación, ellos también se están certificando y a nosotros nos interesa que la DNA, que se convertirá en la Superintendencia de Regulación Sanitaria, se vaya fortaleciendo porque es un tercero confiable», añadió.
Inquifar cuenta con 18 socios con 36 laboratorios que generan 6,500 empleos directos, así como unos 19,500 indirectos. Además, cuenta con un salario promedio más alto en la industria (que de 2020 pasó de $750 a $850 en 2022), debido a que se ha necesitado especialización y capacitación de las personas principalmente en plantas en desarrollo e investigación de productos.