Fieles católicos conmemoraron este día el 42 aniversario del martirio de monseñor Óscar Arnulfo Romero en Catedral Metropolitana de San Salvador donde el cardenal Gregorio Rosa Chávez ofició la misa al santo salvadoreño.
Durante la misa fueron presentadas las reliquias del santo para que cada uno de los asistentes pudieran apreciarlas.
Los asistentes destacaron la labor de Romero, a quien recordaron por las obras que desarrolló en beneficio de los más necesitados durante su ministerio pastoral en la iglesia católica salvadoreña en la década de 1970.
«Es importante conmemorar a nuestro profeta mártir para que las nuevas generaciones y que las enseñanzas que nos dio las pongamos en práctica. Todo esto tiene la importancia porque tiene la vigencia del pensamiento romerista que cada día nos ilumina más a esa reconciliación y paz de hermanos», expresó Napoleón Alfaro.
Cantos, fotografías, mantos, flores y estampas adornaron el altar principal de la catedral y la cripta donde yacen los restos del mártir.
«Volver a recordar la imagen de él, el legado que nos ha dejado, de que él siempre quiso a los pobres y luchó por la justicia cuando el pobre era marginado. Eso nos hace recordar que debemos seguir su ejemplo. Debemos ser solidarios con los pobres, al tener la posibilidad de ayuda no debemos pensarlo dos veces», manifestó Tránsito Hernández.
Por su parte, Mayté Domínguez relató a «Diario El Salvador» que en su niñez, tuvo la oportunidad de conocer a monseñor Romero cuando acudía a diferentes actividades en el entonces Palacio Arzobispal, el cual estuvo ubicado a un costado de la Iglesia El Rosario, en el centro de San Salvador.
«Mi madrina, Refugio Álvarez, era la secretaria de él. Monseñor nos sacaba con diferentes trajes para recibir las limosnas para el Día Internacional de las Misiones que él desarrollaba. Recordarlo es tenerlo presente, ya que él vive en el recuerdo de nosotros», acotó Domínguez.
Señaló la importancia de que los jóvenes puedan conocer la vida y obra de monseñor Romero.