Dubái, que tiene la torre más alta del planeta, registró esta semana un nuevo récord para la piscina de buceo más profunda del mundo, en momentos en que el emirato del Golfo trata de atraer nuevos turistas en medio de una pandemia.
Con sus puertas abiertas de par en par a los visitantes internacionales a partir de julio de 2020, la ciudad muestra regularmente nuevas atracciones faraónicas entre sus rascacielos e islas artificiales.
«Es una piscina de 60 metros de profundidad, 15 metros más que cualquier otra piscina del mundo y el doble de grande», dijo Jarrod Jablonski, director de Deep Dive Dubai, que gestiona el proyecto.
La piscina, que abrió al público el miércoles y «tiene por tema una ciudad hundida», contiene un volumen de agua equivalente a seis piscinas olímpicas, es decir 14,6 millones de litros, agregó.
Con luces y música de ambiente, la atracción abriga dos «hábitats submarinos». Los buceadores pueden explorar las profundidades de una ciudad perdida reconstruida, llena de objetos de la vida cotidiana y cubierta de abundante vegetación.
«Deep Dive Dubai» promete una experiencia inigualable a sus visitantes, especialmente para los buceadores, a quienes les garantizan condiciones optimas de buceo durante todos los días del año.
El lugar ofrece buceo para novatos o técnicos veteranos, pero también brinda servicios para «apneístas experimentados», quienes pueden desarrollar sus habilidades de apnea de forma segura y controlada, junto a instructores de clase mundial.
El lugar proporciona todo el equipo necesario, líneas de ascenso y eslingas de seguridad. Además, quienes no entren a la piscina pueden ser espectadores de la inmersión por medio de ventanas de visualización y monitores.
Entre las condiciones para ingresar a la piscina más profunda del planeta es el hecho de que para bucear se debe tener más de 10 años, y si es un menor, se necesita el acompañamiento de padres o tutores. Quienes quieran realizar apnea, deben poseer la certificación correspondiente.
«Queríamos recordar la herencia del buceo en los Emiratos» y la «pesca de perlas», de ahí la forma de ostra de la estructura exterior, explicó el director, de origen estadounidense.
Una sesión de una hora cuesta entre 500 y 1.500 dirhams (alrededor de 140 a 400 dólares).
En 2019, Dubai recibió más de 16 millones de turistas. Con el lanzamiento en octubre de la exposición universal, el emirato espera llenarse de visitantes, tras un año y medio marcado por la crisis sanitaria.