El tiroteo ocurrido la semana pasada en una escuela primera en Texas ha reabierto el debate sobre la posesión de armas en Estados Unidos y los riesgos que implica la libertad con la que se puede adquirir todo tipo de armamento en la nación norteamericana.
Tras lo sucedido, las críticas no se han hecho esperar por parte de figuras de la farándula y el deporte, así como también de parte de políticas estadounidenses exigiendo que se adopten medidas para regular, o prohibir, el acceso a armas de fuego en EE. UU.
Sin embargo, junto a las críticas, las redes sociales también se han llenado de postales que retratan las colecciones de armas que muchos estadounidenses poseen y que forman parte de su vida cotidiana. Estudios en Estados Unidos señalan que 133 millones de armas de fuego están en posesión de solo un 3 % de la población, el equivalente a la mitad del stock total de armamento existente en la nación norteamericana.
Dichos estudios señalan también que las colecciones de armas de esta parte de la población van desde 8 hasta 140 armas, lo que deja un promedio de 17 armas de fuego por cada adulto en Estados Unidos.
Otro estudio de la Universidad de Harvard y Northeastern estima que, actualmente, hay 265 millones de armas de fuego en las manos de la población de Estados Unidos. Además, señala que, en las últimas dos décadas, los estadounidenses agregaron aproximadamente 70 millones de armas de fuego a sus arsenales privados.
El estudio de Harvard destaca también que aproximadamente 100,000 estadounidenses resultan heridos por un arma de fuego cada año, y un tercio de esos incidentes terminan en muerte. Este estudio también afirmó que la mitad del armamento total en Estados Unidos está en manos de un 3 % de la población adulta.
De igual forma, diversas investigaciones en EE. UU. han asegurado que en el 75 % de las masacres de familias en la nación norteamericana se han cometido por jóvenes con acceso a armas de fuego en actos planificados y que no constituyen hechos de violencia espontánea. El 81 % de estos jóvenes confesaron los homicidios al momento de ser interrogados.
Además, en el 95 % de estos casos, el perpetrador es el cabeza de familia o un miembro masculino de la misma. También, señalan que en todos los casos, le perpetrador tiene acceso a armas de fuego que son propiedad del grupo familiar.