Una de las estrategias del Gobierno de El Salvador para la prevención de la violencia ha sido la construcción de los Centros Urbanos de Bienestar y Oportunidades (CUBO), un esfuerzo que ha significado la apertura de un espacio para el desarrollo integral de la niñez y la juventud salvadoreña.
El director de Reconstrucción del Tejido Social, Carlos Marroquín, anunció que próximamente se van a construir 10 CUBO más, en diferentes puntos del país. Esto será de beneficio para los jóvenes de diferentes comunidades que antes fueron azotadas por la violencia de las pandillas.
«Vienen 10 CUBO más, el proceso de licitación prácticamente se finalizó. Está el de San Marcos, que estará ubicado en la comunidad 10 de Octubre, que fue altamente vulnerable. Luego el de Nejapa, en el lugar conocido como calle vieja, donde estaba la frontera invisible que dividía a las pandillas», detalló el funcionario en una entrevista televisiva que brindó a canal 21.
Marroquín señaló que los CUBO se construirán en Jardines de Zaragoza, ubicado en el distrito de Zaragoza; otro en Ciudad Futura, en el distrito de Cuscatancingo; uno más en Altavista y otro en el Saburo Hirao.
También, se llegará al cantón Chancuyo, en Santa Ana, a Chinameca, en San Miguel; en el Distrito Italia y otro en Ciudad Delgado.
«Queremos llevar un espacio de estos para darles una alternativa a los niños y jóvenes y decirles que el Estado está presente en el lugar, dando una respuesta a través de procesos de prevención de la violencia», dijo Marroquín.
De acuerdo con el funcionario, actualmente están funcionando 12 CUBO, en diferentes puntos del país y cada uno tiene una inversión de aproximadamente 1 un millón de dólares. Esta estrategia forma parte de la fase 2 del Plan Control Territorial, denominada Oportunidades.
En estos espacios, los jóvenes cuentan con diferentes recursos: computadoras, biblioteca, zona de videojuegos, estudio de grabación, entre otros.