El secretario de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras, Enrique Reina, cuestionó la postura de la embajadora de Estados Unidos en ese país, Laura Dogu, sobre una reforma energética impulsada por el Gobierno hondureño.
Dogu expresó a través de su cuenta de Twitter que dicha iniciativa es «crítica para el desarrollo económico» del país centroamericano; y añadió que Estados Unidos tiene «preocupación por el efecto que tendrá sobre la inversión extranjera».
«La reforma energética es crítica para el desarrollo económico. Estamos analizando la propuesta energética y como escrito nos preocupa el efecto que tendrá sobre la inversión extranjera y la independencia de la agencia reguladora», escribió la diplomática estadounidense en su cuenta de Twitter.
Ante esto, el canciller Reina aseguró que dicha reforma «es urgente» para el país, y sentenció que la postura de la embajadora norteamericana «no contribuye con las buenas relaciones entre Estados Unidos y Honduras».
«Sra. Embajadora Ud. ha sido recibida con los brazos abiertos. La reforma energética es urgente como Estado, combate una situación heredada de corrupción y pobreza. Nos preocupa su desacertada opinión sobre política interna, la que no contribuye a las buenas relaciones con EE. UU.», respondió Reina a través de la misma red social.
La iniciativa, denominada «Ley Especial para Garantizar el Servicio de la Energía Eléctrica como un Bien Público de Seguridad Nacional y un Derecho Humano de Naturaleza Económica y Social», es impulsada por el Ejecutivo, y fue enviada al Congreso Nacional de Honduras.
De acuerdo con Ramón Barrios, diputado presidente de la Comisión Especial sobre Asuntos de Extradición en el Congreso Nacional de Honduras, «buscar rescatar la soberanía del pueblo hondureño, sobre un bien público de seguridad nacional y un derecho humano de naturaleza social», y aseguró que «rechazan cualquier injerencia extranjera», en el tema.