Los 10 miembros de la pandilla 18 acusados de asesinar Cristian Joel Mejía Quezada, de 28 años, en San Martín, fueron enviados a prisión por Juzgado Especializado de Instrucción B de San Salvador.
La Fiscalía General de la República les atribuye los delitos de homicidio agravado, agrupaciones ilícitas, daños agravados y robo agravado.
Los pandilleros procesados son: Luis Antonio Anzora, Miguel Alberto García, Fredy Mauricio Romero Rogel, Víctor Manuel Cruz Parras, Jonathan Josué Carpio Méndez, Víctor Manuel Pérez Rivera, Kevin Adonay Mejía Sánchez, Nelson Humberto Carpio y Máximo Orlando Gámez Gil.
Los imputados fueron presentados el pasado 20 de febrero por funcionarios del gabinete de seguridad en la finca La Loma. El 19 del mismo mes, las autoridades exhumaron el cadáver del joven que desapareció el 10 de enero de 2022.
Desde el día que se denunció la privación de libertad de la víctima las autoridades aseguran que activaron sus protocolos de búsqueda y el caso fue retomado por la División Élite contra el Crimen Organizado de la Policía Nacional Civil.
Según las investigaciones de la Fiscalía y Policía la orden de asesinar al joven fue dada por el cabecilla de esa estructura. El procedimiento de captura de los mareros comenzó el 17 de febrero por el delito de agrupaciones ilícitas y otros ilícitos por los que fueron procesados en juzgados de Paz de San Martín e Ilopango y hoy fueron procesados por el homicidio del joven.
El fiscal general Rodolfo Delgado, informó el día de la presentación de los imputados, que Mejía Quezada fue interceptado por los pandilleros de la comunidad Génesis de San Martín, mientras realizaba sus labores como gestor de cobros de una entidad financiera.
Delgado, dijo que los mareros además del homicidio del joven, se han estado dedicando a extorsionar y traficar drogas. Para investigar la desaparición de la víctima, el ministerio público utilizó todos los medios tecnológicos para recopilar pruebas y presentarlas ante el juzgado que desde hoy comenzará a conocer del expediente.
El director de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas, luego de la captura de los acusados, dijo que los equipos de investigación al momento de procesar la escena hallaron un protector de teléfono celular cerca del cuerpo de la víctima y otras evidencias como residuos de sangre que han servido para realizar análisis.