Un total de 1,117 medicamentos han sido decomisados entre enero y mayo de este año, como parte de las inspecciones que la Dirección Nacional de Medicamentos (DNM) desarrolla en conjunto con la Policía Nacional Civil (PNC) en diferentes establecimientos a escala nacional por incumplir con los estándares de calidad requeridos.
«En este periodo, 3.22 toneladas de productos han sido destruidos por no cumplir con las normas de seguridad», detalló el Ejecutivo en un comunicado.
La DNM registra 3,884 inspecciones desarrolladas, en las que se verifica las condiciones de almacenamiento de los medicamentos, que los productos comercializados tengan el debido registro sanitario vigente, y que exista comercialización de fármacos que requieren receta médica.
Recientemente, la DNM ejecutó inspecciones en el mercado de Zacatecoluca, en La Paz.
«Hubo hallazgos importantes por lo que fueron decomisados productos como el Tossulin y la Ranitidina, ambos con alerta sanitaria», indicó la institución en Twitter. La alerta sanitaria significa que está prohíbida la distribución de un determinado producto porque su consumo atenta contra la salud.
El Gobierno advirtió a los diferentes laboratorios y droguerías a abstenerse de comercializar medicamentos que no estén regulados y que incumplan con los criterios establecidos de seguridad y venta, como los fármacos que requieren receta.
Asimismo, señaló que mantendrán vigilancia para prevenir la venta de productos falsificados, productos naturales sin registro, y aquellos que requieran receta médica para su comercialización.