Emoción, y sobre todo tranquilidad fue lo que sintieron los aficionados de Alianza y Limeño en el estadio Cuscatlán, con la seguridad que brindaron las diferentes unidades de seguridad.
Como fue anunciado por el subcomisionado de la Policía Nacional Civil, Benito Solano, fuero aproximadamente 650 agentes los que colaboraron, en sus diferentes unidades, para mantener el orden en los alrededores del Monumental, como en su interior, antes, durante y después del partido.
Desde la tarde del viernes se implementó dicho dispositivo, afuera del estadio para evitar alguna situación anormal.
Ya el sábado en el portón principal se realizó un minucioso registro a cada una de las personas que llegó al estadio. Esto se repitió cuando los aficionados entraron a su respectivo sector. En el lado norte estuvieron los del Alianza, quienes fueron mayoría, y en el otro, los santarroseños.
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Ulises Ventura, un aficionado que llegó desde San Marcos, destacó el ambiente de seguridad: «Es bonito llegar al estadio y sentir esa calma en el estadio, para vivir este partido de fútbol», destacó.
Nahum González, hincha de Limeño, quien viajó desde Santa Rosa de Lima, también resaltó el ambiente de tranquilidad que se vivía en el Cuscatlán: «Es bonito, porque uno siente calma de venir al estadio, traer a sus hijos y disfrutar de este partido de fútbol, dónde la rivalidad solo quedará en las gradas», dijo.
Dentro de las cosas que los agentes decomisaron no hubo nada fuera de lo normal, botellas y recipientes de plástico, encendedores y astas de banderas.
Además de los agentes policiales, también se contó con un buen número de miembros de Comandos de salvamento, quienes brindaron primero auxilios.