«Sí, por supuesto», Kylian Mbappé podría finalmente quedarse en el París Saint-Germain. Respondiendo con pocas palabras después de haber hecho un partidazo el domingo por la tarde, el campeón del mundo reabrió el debate sobre su futuro.
«Ya he dado bastante información, creo que tenéis para poder trabajar», dijo con una sonrisa a los periodistas, en la zona mixta del Parque de los Príncipes después de haber destrozado al Lorient (5-1) con un doblete y tres asistencias.
«No quiero equivocarme», añadió, asegurando no haber «tomado mi decisión. Sé que para la gente está tardando, me hablan de ello todos los días…».
Prudente a la hora de hablar, Mbappé no suele dejar al azar sus declaraciones y sabía perfectamente que las redacciones de deportes estarían en ebullición después de sus salidas en tres ocasiones: primero en Prime Video, luego dos veces en zona mixta con la prensa escrita y después delante de las radios y televisiones.
Mbappé repitió: «No, no he elegido, no he tomado mi decisión, reflexiono, hay nuevos elementos, muchos parámetros».
Son precisamente esos «nuevos elementos» los que levantan las especulaciones, pero ni el club ni el entorno del jugador han aclarado el misterio sobre estos.
Responsabilidades
Se trata probablemente del lugar de Mbappé en «el proyecto»: ha repetido en numerosas ocasiones que quería responsabilidades, quizás simbolizadas por el brazalete de capitán.
No se trata seguro de una cuestión financiera, según una fuente que está trabajando con el jugador sobre su futuro, que señala que «Kylian tendrá dinero en todos los sitios» en los que pueda jugar.
La misma fuente recuerda que el club está listo a ofrecer lo que sea para renovar a Mbappé, que termina contrato en junio y es libre para marcharse por ejemplo al Real Madrid, interesado en el jugador desde hace años.
El hecho de que todavía no haya renovado a principios de abril, a pesar de las numerosas propuestas del PSG desde la temporada pasada, no invitan al optimismo sobre su futuro en París.
El desastre de Madrid, donde el club volvió a tropezar (victoria 1-0 y derrota en la vuelta 3-1) en Liga de Campeones, la obsesión del jugador francés, pareció haberle inculcado la idea de que es imposible levantar la ‘Orejona’ si se queda en la capital francesa.
Pero el jugador, con hambre por hacer historia en su deporte, sabe también que destacaría más ganando la primera del PSG que una más con el Real Madrid, que ya tiene 13 en su palmarés.
Mientras tanto, el domingo por la noche jugó y habló como un líder, defendiendo a la vez los colores de su equipo actual y al conjunto del grupo del enfado de sus propios aficionados.