El Juez de Menores de Soyapango decretó la medida de internamiento por 20 años para un menor de edad pandillero luego que la Fiscalía comprobó que se dedicaba a extorsionar a comerciantes en la jurisdicción de San Martín.
De acuerdo a la información fiscal, en septiembre de 2002, el marero participó activamente en el cobro de diferentes exigencias de dinero. La denuncia de la víctima protegida aseguró que le entregó distintas cantidades en varias fechas.
El parte fiscal detalla que los investigadores de la PNC establecieron, con la víctima, un punto de entrega y al darle seguimiento al menor lograron intervenirlo cerca del Cementerio Municipal de San Martín y tras ser registrado le encontraron el dinero de la extorsión.
La Fiscalía demostró con abundante prueba que el menor consumó las extorsiones en repetidas ocasiones y que es integrante de la pandilla 18 , con el nivel de colaborador y función de extorsionista.
El juez lo declaró responsable por los delitos de agrupaciones ilícitas y extorsión agravada continuada, y le impuso 10 años de internamiento por cada uno de los delitos.