La Unión Europea (UE), Australia y Canadá, así como Noruega, Reino Unido y Suiza pidieron ayer a Israel «tomar medidas concretas para poner fin a la violencia sin precedentes de los colonos israelíes en Cisjordania ocupada».
En un comunicado transmitido por el Ministerio francés de Relaciones exteriores, condenan «firmemente la violencia cometida por los colonos extremistas, que aterrorizan a las comunidades palestinas», denuncian «la incapacidad de Israel de proteger a los palestinos» y le piden llevar ante la justicia a los responsables.
El miércoles, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que estaba a favor de la aplicación de sanciones a colonos israelíes. «El aumento de la violencia por parte de colonos extremistas inflige enorme sufrimiento a los palestinos (…) Por eso soy favorable a imponer sanciones a los autores de ataques en Cisjordania», dijo Von der Leyen ante la plenaria del Parlamento Europeo.
En la opinión de Von der Leyen, esos colonos «deben ser responsabilizados».
«Esa violencia no tiene nada que ver con el combate a [el grupo islamista palestino Hamás], y tiene que terminar», recalcó. Además, esa violencia en Cisjordania «amenaza las posibilidades de una paz duradera», indicó.