El politólogo Óscar Martínez Peñate aseguró que los candidatos presidenciales de la oposición, al no contar con un buen plan de gobierno para ofrecer al electorado, se dedican a hablar «disparates, incoherencias y absurdos». «A los candidatos de la oposición política deberían hacerles exámenes psicológicos o psiquiátricos, con tanto disparate, incoherencias y absurdos que han dicho», escribió Martínez Peñate en su cuenta de X.
En octubre pasado, en una actividad proselitista que desarrolló Joel Sánchez, candidato presidencial por ARENA, en San Miguel, se viralizó un video en redes sociales mostrando al aspirante tricolor cuando entregaba a un joven una cuma, luego de expresar que las computadoras y las tabletas que da el Gobierno del presidente Nayib Bukele solo son para que los estudiantes de centros escolares públicos «anden de plantosos». «Démele una cuma a aquel muchacho, por favor […]. A darle con todo.
No te vayás a salir cortando los dedos», manifestó Sánchez al joven una vez que recibió la herramienta propia para la agricultura. En tanto, Manuel Flores, aspirante a la presidencia por el FMLN, expresó ese mismo mes en un video publicado en la misma red social su deseo por que la niñez retome los juegos de antaño (capirucho, trompo, chibolas…) para evitarle que se adentre en el mundo desarrollado de la tecnología. «A nuestros niños hay que darles un capirucho, no un celular. Hay que enseñarles a jugar lo que nuestra gente aprendió hace miles de años», afirmó el candidato rojo mientras jugaba con un capirucho.
El candidato presidencial por Nuestro Tiempo, Luis Parada, dijo este mes en una entrevista virtual que participa en los comicios del 4 de febrero próximo para evitar un «estallido social» como el vivido en El Salvador el siglo pasado, que lo llevó a un enfrentamiento armado por más de una década.
«Otro estallido social similar al que hubo acá en [la década de] los ochenta es algo que queremos evitar, y por eso estamos participando [en la elección presidencial]», expresó Parada, capitán del Ejército, que renunció a su grado militar. Sánchez, Flores y Parada tienen una intención de voto bajísima para la elección presidencial, según revela la última encuesta de opinión pública del IudopUCA, de cara a las elecciones generales del año venidero.