El quinto año de gobierno que inicia este día el presidente Nayib Bukele será el que mejor evaluación tendrá por parte de los salvadoreños con respecto a exmandatarios del FMLN y de ARENA.
Bukele está cerrando su cuarto año al frente del Ejecutivo con un porcentaje de aprobación del 92 % o con nueve de cada 10 salvadoreños que lo validan en su desempeño, muy lejano si se toma de referencia al expresidente anterior, Salvador Sánchez Cerén, del partido de izquierda, quien cerró su cuarto año al frente del Ejecutivo con una nota de 4.6, según el Instituto Universitario de Opinión Pública de la Universidad Centroamericana (Iudop-UCA).
Ese mismo centro de opinión pública le otorgó en mayo de 2013 una nota de 6.87 al entonces presidente Mauricio Funes, también del FMLN y recién condenado a 14 años de prisión por pactar con pandillas.
Sobre el expresidente Antonio Saca, de ARENA, la medición del Iudop indicó que 46.6 % de los encuestados dijo que estaba gobernando mal al cierre de su cuarto año. Además, esta administración marcó el destino que finalmente el partido tricolor tendría relacionado al Ejecutivo: perderlo.
El 62.7 % de la población dijo que el partido de derecha no debía seguir gobernando.
En el caso del fallecido expresidente Francisco Flores, un 46 % de la ciudadanía afirmaba en el cuarto año del mandato que estaba gobernando mal.
Los expresidentes iniciaron su último año con notas bajas o poco nivel de aprobación, pero esta premisa ha sido rota por Nayib Bukele, quien se perfila para completar su quinquenio con la mayor ponderación en la historia del país, tendencia sostenida desde que triunfó en las urnas.