TEGUCIGALPA – Con las declaraciones del presunto narcotraficante hondureño Geovanny Fuentes Ramírez en una corte de Nueva York, se abre un nuevo capítulo en las denuncias contra el presidente Juan Orlando Hernández, a quien hace un tiempo atrás el hoy imputado lo vinculó con el narcotráfico.
Hernández reiteró su inocencia e insistió a través de su cuenta en Twitter que las acciones de su gobierno contra el narcotráfico contradicen los testimonios de los imputados en procesos internacionales.
“Lo que sería noticia de verdad es si los reportajes sobre los Cachiros y los demás dejarán de ignorar el hecho evidente: que muchos titulares se basan en testimonios falsos de narcos cuyas mentiras son para vengarse, reducir sus penas y recibir otros beneficios”, dijo el presidente en su tuit.
El diputado opositor por el Partido LIBRE, Rony Martínez, asegura que Honduras está cuestionado a nivel internacional por la débil lucha antidrogas.
“Pareciera que hay política de Estados Unidos en terminar con toda esta situación trágica, y lamentamos que las instituciones en Honduras no hagan nada”, declaró.
Por otra parte, el analista jurídico Lester Ramírez dijo que las acusaciones contra el presidente son una mancha para el país y forman una mala imagen.
“Impacta directamente en el gobierno, en su legitimidad, confianza y el respeto de la ciudadanía, que es lo fundamental de todo gobierno, y sin eso no puede llevar políticas, y sin apoyo los gobiernos se vuelven autoritarios”.
En este panorama Hernández dijo que mantendrá la alianza internacional en la lucha antinarcotráfico hasta el último día de su mandato, pero advirtió que si los narcotraficantes buscan ganar beneficios de Estados Unidos con falsos testimonios esta Alianza colapsaría en Honduras y en otros países.