Cerca de 200 niños y sus familias participaron del Festival Tradiciones para la Primera Infancia desarrollado en Apaneca, Ahuachapán, como un trabajo conjunto entre el Despacho de la primera dama, y los ministerio de Educación y Cultura.
El festival proporciona un espacio para la representación de diversas tradiciones que se encuentran en el libro «Tradiciones de mi Tierra», de la serie Bálsamo de la Colección Árbol de Vida, serie literaria que plasma cultura, costumbres, colores y todo lo que caracteriza a los salvadoreños.
La primera dama, Gabriela de Bukele, destacó la importancia de que la primera infancia conozca la cultura del país y la identidad que caracteriza a los salvadoreños.
«Las familias de Apaneca, Nahuizalco, Ataco y Shucutitán disfrutaron del Festival de Tradiciones que desarrollamos en Apaneca, Ahuachapán, viviendo algunas de las tradiciones que nos representan como salvadoreños. Es importante que inculquemos el amor por nuestra cultura desde la primera infancia para que los niños y niñas crezcan orgullosos de ser salvadoreños», aseveró Gabriela de Bukele.
Las tradiciones expuestas en el festival fueron: las bolas de fuego, el Día de la Cruz, las flores y las palmas, los canchules y los farolitos. Fue a través del desarrollo de diferentes talleres impartidos por los Asistentes Técnicos Pedagógicos de Primera Infancia (ATPI), que la niñez pudo experimentar cada una de estas actividades.
«Este es el primer festival del año, pero pronto llegará a otras ciudades de nuestro país para que más niños conozcan y vivan nuestra herencia cultural», indicó la primera dama.
De acuerdo con el Despacho, se desarrolló un picnic literario donde los niños y sus familias participaron de clubes de la lectura dirigidos por escritores y bibliotecarios, así como cuentacuentos dinámicos.
«Otras actividades y espacios dirigidos a la Primera Infancia disponibles en el Festival fueron: Biblioteca Móvil y la Bebeteca Móvil y la presentación de danzas infantiles», detalló el Despacho de la primera dama.
Con estas acciones se da cumplimiento al artículo 59 de la ley Crecer Juntos: «Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a conocer, conservar, desarrollar y recuperar los valores espirituales, culturales, religiosos, lingüísticos y cualquier otro elemento que le permita definir su identidad cultural».