La sobrina del emperador japonés Naruhito, la princesa Mako, se casó con un plebeyo el martes, renunciando así a su estatus real luego de un controvertido compromiso de varios años.
La Agencia de la Casa Imperial Japonesa emitió un comunicado anunciando el matrimonio de Mako con Kei Komuro, ambos de 30 años.
La pareja rompió con la tradición, al renunciar a los rituales y ceremonias habituales de las bodas reales -incluida una recepción- mientras que Mako también rechazó el pago único de alrededor de 1,3 millones de dólares que normalmente se hace a las mujeres de sangre real que abandonan la familia imperial para casarse.
Maiko y Komuro habían sido compañeros de clase en la Universidad Cristiana Internacional de Tokio, cuando anunciaron su compromiso en 2017, diciendo que tenían la intención de casarse el próximo año.
Pero poco después del anuncio surgió una disputa que involucraba un dinero que la madre de Komuro, una viuda, había recibido de un ex pretendiente, y la boda se pospuso. Komuro escribió una extensa declaración explicando la situación, pero aún no está claro si la disputa se ha resuelto por completo.
Komuro pasó los últimos tres años en la facultad de derecho en la ciudad de Nueva York, donde, según recoge The New York Times, los periódicos sensacionalistas documentaban todo, desde su peinado hasta los camiones de comida donde compró su almuerzo.
En una conferencia de prensa, la exprincesa abordó las controversias, los chismes y el peso de la opinión pública sobre la relación, diciendo: «Lo siento mucho por las personas que tuvieron problemas [con nuestro matrimonio]. Además, siento gratitud hacia las personas que se preocuparon en silencio por mí, o las personas que no fueron engañadas por la información no basada en hechos y que aun así continuaron apoyándonos a mí y a Kei».
La pareja expresó su amor del uno por el otro. Mako manifestó: « A medida que avancemos con nuestras vidas, creo que habrá diferentes dificultades. Pero como lo hemos hecho en el pasado, trabajaremos juntos y seguiremos avanzando juntos».
La pareja planea vivir en la ciudad de Nueva York.