La silla principal de Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) ya no es apetecida por los hermanos nacionalistas.
Los dorados tiempos en busca de dirigir esa institución política han quedado atrás. Un solo «nacionalista puro» busca ahora capitanear un barco tricolor a la deriva de un partido que ya no se ufana, como en el pasado, de solo «sumar y multiplicar» entre su militancia.
Carlos García Saade, empleado de la bancada arenera en la Asamblea Legislativa, es el único candidato a la presidencia de ARENA, partido sumido en una crisis interna y en escándalos de corrupción como parte de sus 20 años en el Gobierno Central.
El tricolor realizará mañana internas para solo ratificar la planilla única que encabeza Saade y otras ocho personas para ocupar cargos en la cúpula del partido.
La última elección para elegir a los miembros del Coena fue en 2019, cuando hubo dos planillas: una de Gustavo López Davidson y otra de Francisco Manzur. Ganó la de López Davidson.