El Juzgado Quinto de Sentencia de San Salvador reprogramó para julio el juicio en contra de los exdirectores de Centros Penales Rodil Hernández y Nelson Rauda, que enfrentan cargos por haber malversado $ 3,2 millones de las tiendas penitenciarias durante el gobierno del FMLN.
La audiencia estaba programada para que se realizara este martes 23 de febrero, pero dicho juzgado fue informado que Hernández se había contagiado de COVID-19 por lo que la audiencia fue suspendida.
Los exfuncionarios de la administración de Mauricio Funes son acusados por la Fiscalía General de la República (FGR) de los delitos de actos arbitrarios y administración fraudulenta. Ambos son señalados de haber utilizado dinero de las tiendas penitenciarias para pagar sueldos, sobresueldos, préstamos personales y pago de bonos por un monto de $3.2 millones.
El 24 de septiembre de 2014 Hernández y Rauda fueron liberados de las acusaciones relacionadas al mal manejo de los fondos de las tiendas penitenciarias, esta decisión fue dada a conocer por el Tribunal Cuarto de Sentencia de San Salvador; sin embargo, la Cámara Primero de lo Penal de San Salvador ordenó se realizará nueva audiencia en contra de los exfuncionarios de ese gobierno del FMLN, pues la resolución fue apelada por la Fiscalía.
El Ministerio Público argumentó que los jueces emitieron una valoración parcializada porque se basó en la prueba que favorecía a los imputados. Con eso se incurrió en falta y se volvió contradictoria la fundamentación de la sentencia absolutoria.