San Vicente y Las Granadinas le sacó petróleo al césped del Cuscatlán en un juego donde acarició menos la pelota, pero tuvo la pegada suficiente para imponer su autoridad 3-1 sobre Bonaire y llegar a 13 puntos en la tabla del grapo A de la Liga B en el cierre de la Liga de Naciones de Concacaf.
Bonaire dominó y le dio mejor trato a la pelota en el primer acto, pero su dominio fue estéril ya que los sanvicentinos fueron más punzantes y necesitaron de poco para llegar a la celebración del primer gol.
Sobre el cuarto de hora los Emerald Boyz marcaban una abrumadora posesión de balón de 73% y dominaban en el pase y traslado de pelota, pero muy poca acción frente al marco.
San Vicente y Las Granadinas, por el contrario, tuvo poco la pelota en este episodio, pero se bastó de poco para que Diel Spring mandara a guardar el balón al fondo de la red y los pusiera arriba 1-0 en el 19’.
El tanto, sin embargo, no minó las intenciones de Bonaire que mantuvo la tónica y posesión de pelota hasta en un 68%, consiguió sumar seis remates (tres a marco), al igual que su rival, pero se fue abajo en el marcador a la pausa de descanso e hidratación.
En la vuelta a las acciones el libreto fue el mismo, Bonaire poseyó la pelota y concretó mayor cantidad de pases, pero fueron los Vincy Heat los que llegaron nuevamente, primero, al gol.
Se corría el 67’ cuando Kyle Edwards decretó el 2-0, pero el festejo fue efímero ya que Jamal Yorke movió la pizarra con un gol en su propia puerta para el 2-1, en el 74’.
La diana, no obstante, no alcanzó ni para el respiro a Bonaire que solo minutos después, 82’, vio como Spring se agenciaba su doblete y sepultaba cualquier intento de remontada con el 3-1 definitivo.