En una segunda protesta consecutiva de decenas de personas, los habitantes de la céntrica alcaldía Benito Juárez denunciaron que el agua que sale de las llaves de sus casas tiene «un olor a gasolina» y «sabor raro», lo que, aseguraron a medios locales, les ha provocado a algunos daños cutáneos y oculares.
Tras las manifestaciones, las autoridades cerraron el pozo Alfonso XIII que surte este sector.
Este pozo público «ya no surte agua a la red. Fue limpiado y fue cerrado. Evidentemente en la red todavía queda agua de la que estuvo lanzando el pozo en algunos fragmentos y zonas, pero se va a ir limpiando con el agua que llega a presión», dijo este miércoles el alcalde de la capital, Martí Batres, en una alocución a la prensa.
El funcionario dijo que el 31 de marzo recibieron el primer reporte de vecinos de esa zona.
Tras varios análisis se descartó que el pozo se haya contaminado con gasolina; en cambio, se trata de «una sustancia de la familia de los aceites y lubricantes», añadió Batres.
A unos 500 metros de esa fuente de agua se encuentra un ducto de Petróleos Mexicanos que no presenta fugas, prosiguió.
Las autoridades continuarán con los análisis para determinar exactamente la naturaleza de ese agente y cómo llegó hasta el pozo.
Por su parte, vecinos de Benito Juárez, considerada como una de las más ricas de México por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de la ONU, han dicho a la prensa que llevarán ante tribunales al gobierno de la Ciudad de México.
Los residentes exigen que se informe qué elemento contaminó el agua que llega a sus hogares.
El caso se registra en momentos en que varios barrios de la Ciudad de México y suburbios -donde viven unas 20 millones de personas- sufren desde mediados del año pasado cortes en el suministro de agua.
El año 2023 fue el más seco registrado en México desde 1941, con un déficit de lluvia de más de 20% «por debajo del promedio», según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
La sequía, que se ha extendido hasta este año, disminuyó los niveles de las represas que alimentan al sistema Cutzamala, que aporta 25% del agua del Valle de México.
La temporada de lluvias inicia a finales de mayo y las temperaturas están por encima del promedio registrado habitualmente en esta época, superando los 30ºC.