Sembrando Vida es una estrategia orientada a diversificar los cultivos tradicionales de los productores de 10 departamentos del país, ubicados en el corredor seco.
La iniciativa se ejecuta con el apoyo de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid) en coordinación con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA).
En la actualidad, más de 10,000 familias se ven beneficiadas con el apoyo para la producción de hortalizas y otros alimentos a modo de garantizar la seguridad alimentaria, reactivar la economía y dinamizar el desarrollo local.
Según las autoridades, los cultivos de maíz y frijol son los principales en desarrollarse en esta zona del país; sin embargo, las inclemencias climáticas que los afectan impiden a los pequeños agricultores alcanzar un crecimiento sostenido de sus producciones.
La estrategia entre El Salvador y México, ofrece asistencia técnica para relevar el tipo de cultivos que se realizan en San Miguel, La Unión, Morazán, Usulután, entre otros, priorizando la producción de hortalizas, que tienen una mejor comercialización y por lo tanto permiten a las familias obtener mayores ingresos.
«Este es un programa que busca incentivar el consumo local, así como la comercialización de los insumos que los agricultores producen en sus parcelas», dijo Raymundo Gutiérrez, agregado administrativo de la Embajada de México en El Salvador.
Mientras tanto, Guillermo Marroquín, productor de San Pedro Mazahuat en La Paz, beneficiado por Sembrando Vida, consideró que la iniciativa ha aportado una nueva forma de ver los cultivos, a través de la transformación de lo tradicional a lo rentable.
«El programa Sembrando Vida, nos ha enseñado a hacer cultivos diferentes, ahora nuestro producto estrella es el loroco, seguido por el plátano, además estamos cultivando productos que antes pensábamos que no se nos daban como tomate, pepino, rábano y cilantro», dijo.
La estrategia binacional fomenta no solamente el trabajo, sino también la unidad de las familias, para que los jóvenes puedan encontrar verdaderas oportunidades de desarrollo en el sector agrícola, señala el MAG en un comunicado de prensa.
Agregaron que, el gobierno mexicano apunta a una segunda fase, con capacitación en la comercialización de los productos, para generar mayores ingresos económicos de las familias en zonas rurales.
Otros de los beneficios de Sembrando Vida son la contratación de 57 técnicos extensionistas, encargados de dar seguimiento a los productores del corredor seco, dos coordinadores regionales, la entrega de 3,507 paquetes agrícolas, la instalación de 200 sistemas de riego y el establecimiento de 40 biofábricas.