La cifra de muertos por la tragedia climática histórica en el estado de Rio Grande do Sul (sur) ascendió a 56, en tanto que hay 67 desaparecidos, 32.900 evacuados y al menos 356.000 personas sin electricidad, informó hoy sábado la Defensa Civil.
Las fuertes lluvias que vive el estado desde hace casi una semana, han provocado el desborde de ríos, incluyendo el Guaiba, además de que el centro histórico y otros barrios de Porto Alegre, capital del estado, se encuentran prácticamente bajo el agua, por lo que están inhabilitados la estación de autobuses y el aeropuerto internacional Salgado Filho.
En total son 281 municipios afectado por el fenómeno meterológico, indicó la Defensa Civil.
«Las cifras podrían cambiar sustancialmente en los próximos días, a medida que logremos acceder a los lugares e identificar otras vidas perdidas», dijo a la prensa el gobernador de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite.
Por su parte, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ordenó abrir en Porto Alegre una oficina de emergencia del Gobierno nacional para facilitar la ayuda técnica y financiera, luego de enviar el viernes 100 miembros de la Fuerza Nacional, tropa de elite policial, para ayudar en las tareas de rescate.
El estado es un punto clave en el transporte terrestre del comercio del bloque del Mercado Común del Sur (Mercosur) y es además uno de los principales productores de arroz, soya y carnes de Brasil, que tiene su economía frenada desde hace una semana.
Según la Policía Federal de Caminos, 188 tramos de carreteras enfrentan algún tipo de bloqueo o bloqueos totales.