El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) informó ayer que la tormenta tropical Pilar empezará a salir del territorio nacional este día, pero mantendrá su influencia con lluvias hasta el jueves.
Si bien se prevé que Pilar empezará a bajar su influencia hoy, ha dejado saldo de dos personas fallecidas, daños en 8 viviendas y obligó a evacuar a más de 90 familias; en Cacaopera, Morazán (3), La Unión (10), Conchagua (20), San Salvador (2), Ataco (9) y en Acajutla (50),
Según explicó el ministro Fernando López, el ingreso de un frente frio ha frenado el avance de la tormenta al país. «A partir del miércoles, la tormenta va a girar y se va a comenzar a alejar de nosotros, va a empezar a tomar un rumbo oeste hacia el océano Pacífico y nos va a dejar de influenciar», dijo López.
El MARN prevé que para la mañana del jueves se registren menos lluvias, sin embargo, en la noche podrían presentarse tormentas eléctricas.
«A partir del jueves 2 de noviembre podríamos tener, por la mañana, menos lluvias; por la tarde y noche vamos a continuar con las precipitaciones. En horas de la noche podrían presentarse tormentas eléctricas», señaló López.
Hasta ayer por la tarde, la tormenta tropical Pilar se ubica a 290 kilómetros al suroeste de San Salvador, con vientos sostenidos de 85 kilómetros por hora. Sin embargo, esto no quiere decir que se tendrán esos vientos en el país, aunque sí se esperan vientos en aguas profundas.
El funcionario advirtió que cuando se presentan este tipo de eventos existe amenaza por deslizamientos y los suelos se saturan de agua. «Recordemos que tenemos varias zonas susceptibles a inundaciones, especialmente la zona costera, el Bajo Lempa, Jiquilisco, Laguna de Olomega, Golfo de Fonseca, Barra Salada, desde Garita Palmera hasta el Puerto de Acajutla, entre otras», indicó.
Asimismo, recomendó no ingresar al mar, ya que el oleaje se ha incrementado, hay viento y es posible que haya inundaciones por taponamiento en algunas bocanas. Es por ello, que se mantiene la prohibición de ingreso al mar.
Familias fueron puestas a salvo en varios municipios
Tres personas fallecidas, siete deslizamientos, ocho viviendas inundadas y trece árboles caídos, así como 94 familias evacuadas en La Unión, Morazán, Ataco, Acajutla y San Salvador, son las emergencias registradas al mediodía del martes por la Dirección Nacional de Protección Civil. El trabajo preventivo y de repuesta ha sido efectivo para salvaguardar la vida de los salvadoreños.
«Hemos tenido siete deslizamientos; tres en La Paz, dos en Santa Ana, uno en La Libertad y uno en Morazán. Algunos de estos temporalmente interfirieron con la movilidad, pero ya han sido removidos los escombros gracias al esfuerzo, al trabajo articulado con las instancias y con la Comisión Técnica Sectorial de infraestructura liderada por el Ministerio de Obras Públicas», dijo el director de Protección Civil, Luis Alonso Amaya, quién se movilizó al Centro de Operaciones de Emergencias (COE), en San Miguel. Las viviendas inundabas se registran: siete en La Paz y una en San Vicente.
En Acajutla, Sonsonate son 123 personas que están albergadas siendo atendidas por las instituciones como el Ministerio de Salud y la Dirección de Albergues quienes les está proveyendo alimentación y agua segura.
Ayer, la comisión departamental de Protección Civil de Ahuachapán, se desplazó a la comunidad El Triunfo en el municipio de Concepción de Ataco, para concientizar a las familias que residen en el lugar y así lograr evacuar a 21 personas que residen en lugares de alto riesgo.