Esta semana reanudan los entrenamientos la Selección mayor de El Salvador, con miras al inicio de la Eliminatoria Mundialista 2026. Una de las novedades es el portero Víctor Rafael García, uruguayo nacionalizado salvadoreño desde el 2019, quien confesó estar muy emocionado con este llamado.
«La verdad es que estoy muy feliz. Lo dije antes, cuando comenzó la emoción de la nacionalización en 2019. Siempre lo dije que estoy a disposición de lo que consideren, porque yo amo a este país, es mi segunda casa, la de mi familia, mi hija es salvadoreña, yo soy salvadoreño, Entonces como no sentirme feliz», expresó el guardameta de Águila, tras el triunfo 4-2 sobre Firpo, en la jornada 17 de la Primera División.
Rafa llegó a El Salvador en 2017, para jugar con el Alianza. En 2019 fue nacionalizado salvadoreño, por decreto en la Asamblea Legislativa, tomando en cuenta que su hija nació en El Salvador.
«Han pasado muchos años de ese momento (nacionalización) y hoy estoy muy orgulloso, sobre todo de esta posibilidad de mi trabajo y de siempre ir por más. Desde mi posición colaborar desde donde sea. Si el cuerpo técnico considera que puedo estar en el campamento. Voy a sumar, a colaborar y a disfrutar porque de eso se trata. Ya más adelante se verá», añadió el portero.
García contó sobre su proceso con la Selección: «Está en manos de la parte jurídica de la federación, sé que está muy bien ese tema, pero no tengo claro ese tema para que eso se confirme, pero se está en ese trámite». También reveló que ya tuvo un acercamiento con el técnico David Dóniga: «Hablé con él, el día que me invitaron a un partido a algunos jugadores de la Liga Mayor. Él mostró su buena voluntad para que yo pueda ser parte del grupo, yo también le demostré la buena disposición y lo que dependía de la parte legal, ya no depende de él ni de mí. Así que, de la parte deportiva estamos los dos en sintonía y falta lo otro».