La emotiva iniciativa de este lunes estuvo acompañada por una jornada de sol y agradable temperatura, y se realizó en el marco del programa «BAmor» del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, que permite a sus ciudadanos casarse en lugares emblemáticos, como el Rosedal, el Teatro Colón, el Museo Casa Carlos Gardel o el Autódromo «Oscar y Juan Gálvez», el principal del país sudamericano.
La propuesta romántica es elegida cada año por cientos de parejas a través del Registro Civil de la Ciudad, organismo dependiente del Ministerio de Gobierno, explicó a Xinhua la doctora Alejandra Cavalieri, oficial público del Registro Civil capitalino y responsable de formalizar los enlaces.
«En el marco de los ‘matrimonios emblemáticos’, el gobierno de la ciudad permite elegir determinadas sedes. Hoy me ha tocado concurrir aquí al Rosedal a celebrar matrimonios emblemáticos por el Día de los Enamorados. Las parejas eligieron este lugar», explicó la funcionaria.
Cavalieri destacó que «el hecho de casarse es mucha movilización para las parejas, pero llegar hasta aquí, a este lugar, en este ámbito, y además el día que nos ha tocado el día de hoy, tan hermoso, es muy movilizante para las parejas».
La zona de la glorieta y el embarcadero del Rosedal lucieron decorados especialmente para la ocasión, con adornos florales, sillas blancas y una alfombra roja.
El espacio se encuentra dentro del Parque 3 de Febrero, el principal espacio verde de Buenos Aires.
Cada una de las cuatro parejas que contrajeron matrimonio este lunes pudo invitar hasta 50 invitados a la ceremonia que se extendió por una hora, explicó Cavalieri.
«Se consulta a las parejas si quieren algo especial, si quieren que hablen los testigos, si ellos se colocan las alianzas», añadió la funcionaria.
El programa «BAmor» nació en 2016 en el Teatro 25 de Mayo, más tarde se repitió esta experiencia en el Teatro Colón, para luego ampliarse a una treintena de lugares emblemáticos, donde los vecinos pueden sentirse identificados por su historia.
Cavalieri está acostumbrada a las ceremonias matrimoniales, pero no por ello pierde la emoción que siente al observar como testigo privilegiada cada vínculo.
«Es un trabajo muy lindo trabajar con el corazón y el amor de la gente», resumió la funcionaria, quien ha oficiado más de 6,000 enlaces civiles a lo largo de los últimos siete años.
Las parejas que desean celebrar sus matrimonios en el Rosedal o en otro lugar emblemático tienen que anotarse en un registro del gobierno de la ciudad.
Debido a la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19), el protocolo establece la celebración de un matrimonio cada hora, para evitar la acumulación de público y permitir el distanciamiento social, explicó Cavalieri.
«El 14 de febrero es una fecha que muchos eligen, en las sedes los turnos están completos, hoy aquí hubo cuatro. La particularidad de la pandemia fue que muchas parejas, después de muchos años de convivencia, han venido a casarse», resaltó la funcionaria porteña.