En una reciente entrevista, el economista y expresidente del BCR en gobiernos del FMLN, Carlos Acevedo, calificó la administración tributaria de los cuatro años de mandato del presidente Nayib Bukele como «exitosa».
«La administración tributaria creo que también ha sido exitosa. Somos ahora el país con la mayor carga tributaria en América Latina, después de ser a principios de los años 90 uno de los países con la menor carga tributaria del mundo», destacó.
En 2021, El Salvador, por primera vez en la historia, tuvo una recaudación de más del 20 % del Producto Interno Bruto (PIB), siendo la más alta de América Latina; luego, en 2022, ese hito se superó con creces, al cerrar con un incremento interanual de 11.8 % en ingresos corrientes y contribuciones.
Además, este año esa espiral ascendente se ha mantenido. De acuerdo al Ministerio de Hacienda (MH), al cierre de abril se superaron en $15.5 millones las proyecciones de recolección del impuesto sobre la renta (ISR) que había hecho el Gobierno en el presupuesto de 2023.
Por otro lado, Acevedo consideró que la gestión de deuda ha sido sostenible, tomando en cuenta que se heredó un contexto complicado, el cual se agravó con elementos como la pandemia por COVID-19 y la crisis de suministros.
«Creo que a pesar de que se heredó una deuda de casi $20,000 millones y a pesar de las necesidades de financiamiento que han derivado de encontrarse a los nueve meses de gestión con una pandemia, la peor pandemia en más de un siglo y la peor recesión también, la gestión de la deuda ha sido sostenible», precisó.
Dicha gestión de pasivos, que incluyó una operación de recompra de bonos que generó $288 millones en ahorro a las arcas del Estado y permitió pagar sin contratiempos el compromiso de enero 2023, posibilitó que agencias como Fitch Ratings y S&P Global Ratings subieran las calificaciones del país hace unas semanas.
Otros ámbitos de la gestión
Para el experto, hay varios ámbitos de la gestión en los que se ha trabajado bien, pero la «joya de la corona» es la desestructuración de las pandillas.
«Creo que el gran “hit” ha sido el tema de la seguridad. La desestructuración de las pandillas, no solo es la política pública más importante de este Gobierno, sino que yo diría que es la más importante de medio siglo de la historia de El Salvador. No veo otra política pública que tenga el alcance, la repercusión, las implicaciones y los beneficios para la economía y la vida del país, que tiene esto», apuntó.
A la vez, resaltó la apuesta Surf City, la cual está generando dividendos al país y estimó que es «uno de los ejes estratégicos de la reactivación económica». Asimismo, dijo que el trabajo en infraestructura vial ha sido importante para la conectividad y para la mejora en la plataforma logística.
«El país que se heredó, yo diría que casi se estaba cayendo a pedazos, con desequilibrios fiscales, desequilibrios en la balanza comercial, pobreza, baja inversión en educación y salud, deuda pública alta, todo un cóctel de problemas que alguna gente que quiere que todo esté resuelto, cuando se ha ido acumulando en medio siglo. A pesar del contexto global tan adverso y del contexto doméstico que se heredó, yo creo que se ha ido haciendo bastante bien la gestión», concluyó.