El Tribunal de Comercio de París multó el lunes a Apple con un millón de euros (una cifra similar en dólares) por imponer condiciones desequilibradas a los desarrolladores de aplicaciones móviles y tendrá que cambiar además sus prácticas para cumplir la nueva normativa europea.
El gigante estadounidense, que obtuvo 90.000 millones de dólares de ingresos entre julio y septiembre, fue denunciado en 2017 en nombre del ministro de Economía y Finanzas francés, Bruno Le Maire, cuando Estados Unidos, entonces bajo la presidencia de Donald Trump, quería gravar las importaciones de acero y aluminio.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso AFP, el tribunal de comercio considera que hay un «desequilibrio importante» e «inseguridad jurídica y económica significativa» derivada, en particular, de la imposibilidad para los desarrolladores de renegociar los términos del contrato con Apple o de impugnar la suspensión de una aplicación.
«Apple cree en los mercados dinámicos y competitivos donde la innovación puede florecer (…) Revisaremos cuidadosamente esta decisión y continuaremos nuestros esfuerzos para apoyar a los desarrolladores y ofrecer una experiencia segura a los usuarios», reaccionó Apple el lunes en un comunicado.
Google fue multado por su parte en marzo con dos millones de euros y la obligación de modificar siete cláusulas de su contrato de distribución de aplicaciones.
Apple y Google, los dos gigantes estadounidenses editores de los sistemas operativos móviles iOS y Android, están bajo presión para justificar las comisiones que cobran a los desarrolladores de todo el mundo.
En consecuencia, redujeron a la mitad sus comisiones para pequeños desarrolladores y suscriptores y están permitiendo más flexibilidad en la fijación de precios de las aplicaciones.