Según reportes de la época, el primer partido de la Selecta acabó con derrota de 7-0 (3-0 dicen algunos) ante Costa Rica la mañana de un 14 de septiembre de 1921, y el último 3-0 ante Canadá la noche del 8 de septiembre de 2021. Hace 100 años estuvo Carlos Escobar Leyva bajo los tres palos y en 2021 Mario González.
Lo que se conoce como el génesis de la Selecta y el colofón hasta septiembre de este año se resaltan números y renglones escritos en negro, pero en medio de este siglo de historia la Azul también se ha vestido de gloria.
Cuando se habla de la selección de El Salvador lo primero que resalta con letras mayúsculas son las asistencias a las dos Copas del Mundo: México 1970 y España 1982, pero antes de eso también consiguió dos laureadas y aplaudidas participaciones.
En 1954, por ejemplo, la Selecta, con jugadores de renombres como Manuel «Tamalón» Garay en la portería y Juan Francisco «Cariota» Barraza en el ataque, se colgó la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Esta hazaña es de grata recordación para el mundialista de España 1982, Carlos Recinos, quien la valora como uno de los grandes éxitos de la Azul.
«La Selección ha tenido varios éxitos desde que comenzó a jugar el fútbol organizado. En 1954, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe se quedó campeón en México y [Juan Francisco] Barraza rompió las redes de la portería. Eso dio mucho de qué hablar», recodó «Imacasa» Recinos.
Salvador Mariona, Mundialista de El Salvador en México 1970, si bien resalta las dos asistencias a mundiales de fútbol, también trajo a colación la clasificación a los Juegos Olímpicos de 1968, en México.
«Yo creo que lo más sobresaliente quizá es la ida a esos dos mundiales», abona por su parte Mario «Macora» Castillo, jugador que vistió los colores de la Azul en la cita mundialista de España 1982.
De México a España
Entre los mundiales de México 1970 y España 1982, El Salvador disputó seis encuentros y no celebró ni una sola victoria. Cayó 3-0 ante Bélgica, 4-0 frente a los aztecas y 2-0 con la exUnión Soviética en territorio mexicano en la primera cita.
Esos resultados, abultados si se quiere, fueron acordes para un El Salvador que se presentaba como el primer país Centroamericano en estas lides.
Luego, 12 años más tarde, en tierras ibéricas se cayó 10-1 ante Hungría, 1-0 frente a Bélgica y 2-0 con la Argentina de Maradona. Sin embargo, con todo y el saldo negativo, para quienes participaron solo el simple hecho de asistir es un fruto exitoso.
«En el fútbol en Centroamérica no es fácil conseguir dos participaciones en una Copa del Mundo- Hay países como Guatemala y Nicaragua que no han podido ni siquiera ir a uno», expone el Imacasa Recinos.
Joaquín Canales Escobar, quien vistió la Azul entre mediados de las décadas ochentas. y noventas también destaca la participación del país en dos mundiales.
«Obviamente los éxitos de la Selección han sido clasificar a los mundiales del 70 y 82. Eso ha sido lo máximo que ha hecho independientemente de los resultados», manifiesta Kin Canales.
El marcador catastrófico de 10-1 recibido de parte de los húngaros es, sin embargo, una mancha muy grande que acompaña a la generación que participó en el 82 y así lo confirma Macora Castillo.
«Desgraciadamente esa marca es de por vida. Estamos marcados con esa derrota de 10-1 contra Hungría. Son malos recuerdo para la afición y ya no digamos para nosotros que somos los que participamos», admite Castillo.
Luis Baltazar Ramírez «el Pelé» Zapata, el único goleador en Copa del Mundo, piensa que ese marcador «fue engañoso» y que tenían selección «para más». «Psicológicamente íbamos bien jodidos: a 15 días de viajar todavía no nos habían pagado tres meses [de salario] que nos debía la Federación», expone, mientras argumenta, además, que a los jugadores del interior del país les tocaba viajar en plena guerra en bus y les paraban en los retenes.
«Eso no lo reconoce nadie, pero había mucha peligrosidad en ese aspecto», argumenta al traer a cuenta la guerra civil que vivió el país por 12 años y dejó miles de muertos y desaparecidos.
De la última clasificación a la fecha, han pasado casi 40 años, y la Azul está embarcada en su enésimo proceso. Hoy, en el año del Bicentenario de independencia patria, El Salvador disputa un octogonal final y quiere ver ondear el azul y blanco de su bandera en Catar 2022, pero el duro camino recién empieza y serán nuevos nombres los que aparecerán si se consigue la gesta heróica.