La ciudad de Chicago, Illinois, Estados Unidos, registró un fin de semana sangriento, con seis fallecidos y al menos 32 heridos en tiroteos. Las edades de las víctimas mortales se encuentran entre los 16 y 40 años.
El viernes en la noche, perdió la vida un adolescente de 16 años en el vecindario Auburn Gresham tras una balacera. Los oficiales informaron que tenía heridas de bala en el pecho y fue declarado muerto en un centro médico.
Pasadas las 12:00 de la madrugada del sábado, la policía reportó un tiroteo masivo en North Lawndale, donde una persona falleció y cuatro más resultaron heridas. La versión preliminar indica que desconocidos se acercaron a sus víctimas y les dispararon. Hasta ayer, la policía no publicó actualización de arrestos.
Otros tres hombres de 40 años y uno de 29 murieron en otros incidentes, entre el sábado en la madrugada y el domingo.
Otra tragedia en la que se involucró a un menor de 13 años sucedió en la cuadra 1900 de East 67th Street. El adolescente se trasladaba en su bicicleta cuando fue impactado por un vehículo rojo. Recibió una herida de bala en la rodilla, pero está estable.