Al Tribunal de Sentencia de Chalatenango no le tembló la mano para condenar a 33 años de prisión a Orlando Sion acusado de intento de feminicidio y maltrato infantil en contra de su compañera de vida y sus seis hijos con edades entre uno a diez años.
Según la Fiscalía, los hechos ocurrieron en el municipio de Citalá donde en el tiempo que estuvo casado «obligaba a la señora a tener relaciones sexuales, también golpeaba sus hijos con varas hasta que se quebraban en ellos».
Las investigaciones del caso muestran que la víctima estuvo sometida a violencia intrafamiliar, la golpeada al igual que a sus hijos. Se informó que Sion llegó al punto de golpear a sus hijos con varas hasta quebrárselas en el cuerpo. En el caso de las niñas –según la Fiscalía- las tomaba del cabello y las arrastraba.
«…hechos que eran constantes durante la convivencia familiar; además, ejerció todas las formas de violencia en contra de ella –su pareja- ya que la amenazaba, insultaba, golpeaba y obligaba a darle el dinero que ella obtenía, a veces cuando andaba ebrio llevaba otra mujer a la casa, entre otros hechos de violencia», fue parte del tormento al que estuvo expuesto esta familia.
Lea también: Hombre con problemas mentales y ebrio mató a su madre en Ayutuxtepeque
Uno de esos tantos momentos de maltratos sucedió en febrero de 2018 cuando al sujeto comenzó a golpear a su pareja. El detalle de lo sucedido en esa ocasión también fue mencionado en la acusación.
«…luego la amarró de las manos y pies tomándola del cuello, le puso un corvo amenazándola que la iba a matar a ella y sus hijos, luego tomó una escopeta y le disparó, pero no le impactó a ella el disparo; después tomó del cuello al bebé de tres meses diciendo que lo iba a matar, ante lo cual y como pudo logró soltarse -su pareja- y salió corriendo de la casa a buscar ayuda, caminó ensangrentada desde aproximadamente las 8:00 p.m. hasta llegar al puesto policial a la media noche», informó la Fiscalía.
El sujeto fue denunciado en la Policía y cuando llegaron a la vivienda para capturarlo ya se había ido del lugar, por lo que fue girada una orden de detención. A los pocos días fue arrestado. Durante la audiencia de vista pública, el referido tribunal lo condenó a 33 años de prisión.