Un grupo de congresistas de Estados Unidos reconoció, durante un panel, los avances de El Salvador en inversiones, turismo, y reducción de homicidios, al tiempo que recrimó al presidente Joe Biden por «amenazar» el progreso que el país ha logrado bajo la dirección del Presidente Nayib Bukele.
En palabras de la representante republicana María Elvira Salazar, la Casa Blanca ha fallado en dar el respeto que El Salvador se merece al haberse convertido en un nuevo país y, lejos de esto, amenazó este progreso «al sancionar a cinco de sus oficiales de gobierno principales».
«El presidente Nayib Bukele heredó el país más peligroso de toda América Latina y, en menos de tres años, lo ha convertido en un refugio seguro para el turismo y la inversión. Desmanteló las pandillas, redujo el nivel de homicidios por 60 % y abrió al país a los negocios», mencionó Salazar durante el panel del Subcomité del Hemisferio Occidental, parte del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos.
«La economía de El Salvador ha subido a promedios históricos por segundo año consecutivo, pero la Casa Blanca, lastimosamente, amenazó su progreso al sancionar a cinco de sus oficiales de gobierno principales», continuó la legisladora republicana.
Sobre otros países de la región, Salazar también destacó que el mandatario de Guatemala, Alejandro Giammattei, le ha expresado que el presidente Biden ha descuidado la relación bilateral.
Además, la republicana agregó que Washington ha abandonado a su suerte a los haitianos y a los dominicanos, además de extender alertas de viaje que han sido dañinas para el turismo de República Dominicana, que ahora sale a flote.
En diciembre de 2021, el Gobierno de Estados Unidos sancionó a Carolina Recinos, jefa del Gabinete del Gobierno de Bukele.
Además, el Departamento del Tesoro emitió escritos similares en contra del ministro de Trabajo, Rolando Castro, y del secretario Jurídico de la Presidencia, Conan Castro, entre otros funcionarios del Gabinete salvadoreño.
«Esta claro que el Gobierno de Estados Unidos no acepta colaboración, amistad o alianza. Es sometimiento absoluto, o nada. Se ven hasta absurdas esas acusaciones diarias», reaccionó en aquel momento el presidente Bukele.
«No sabía que les interesara tanto El Salvador. Tal vez lo que les interesa, es detener el “mal ejemplo”», ironizó el mandatario, que cuenta con un aplastante apoyo de la población salvadoreña.
En más de una ocasión, tanto Bukele como sus funcionarios de Gobierno han hecho saber que el país ya no está interesado en servir como instrumento para la Casa Blanca, sino que ahora se construye una relación entre iguales.