En 1975, El Salvador pasó a la historia del mundo al ser el anfitrión de la 24.a edición de Miss Universo.
El Pulgarcito de América recibió a 71 bellas concursantes y se definió que la gala de elección y coronación se llevara a cabo el sábado 19 de julio en el Gimnasio Nacional Adolfo Pineda.
La ganadora de aquella noche fue Anne Marie Pohtamo, de 19 años, representante de Finlandia.
48 años después, el Adolfo Pineda volverá a ser sede de Miss Universo, esta vez en su 72.a edición.
Con la realización de los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023 (del 23 de junio al 8 de julio) las instalaciones del gimnasio comenzaron a transformarse, pero al ser elegido otra vez sede del más importante concurso de belleza del planeta el lugar se perfila como un espléndido y moderno escenario que, de nuevo, pasará a la historia.
Cuadrillas de trabajadores del Ministerio de Obras Públicas trabajan en todo el inmueble. Afuera se dan los últimos toques a la nueva fachada y colores que tendrá, mientras que adentro se pulen los pisos y se ajustan las butacas, entre otras obras.
Sobre toda la duela del gimnasio se trabaja en la instalación del escenario por donde desfilarán las 90 concursantes de todo el mundo, la mayoría de las cuales ya se encuentran recorriendo diversos destinos turísticos y lugares emblemáticos del país.
Solo faltan nueve días para saber quién será la próxima mujer más bella del planeta y la representante de El Salvador, Isabella García-Manzo, confía en que dará una gran sorpresa esa noche.
Un poco de historia
El gimnasio nacional José Adolfo Pineda (de San Salvador) fue construido entre 1950 y 1956.
El proyecto nació por pedido del Ministerio de Cultura de la época. La obra estuvo a cargo del Ministerio de Obras Públicas y fue desarrollado por la Dirección de Urbanismo y Arquitectura.
El diseño es del arquitecto sueco Rolf Gullmar Ströller, el diseño de las boleterías es de la arquitecta austriaca Ehrentraut Schott y el cálculo estructural fue realizado por el ingeniero Martin Schultz.
En 1982 el gimnasio fue nombrado en honor al baloncestista José Adolfo «Chorro de Humo» Pineda, quien logró medalla de oro en los VIII Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1959.
La develación de la placa con el nuevo nombre se realizó el 23 de abril de 1982, donde asistió Adolfo Pineda. Originalmente, el gimnasio tenía capacidad para 9,000 personas.