El 29 de octubre, a eso de las 11:00 de la noche, El Salvador tuvo una de las páginas más oscuras de la historia de este año 2020. En la comunidad Los Angelitos II, en el municipio de Nejapa, en el departamento de San Salvador, un alud de tierra que recorrió casi 4 kilómetros arrasó con todo a su paso, dejando 10 fallecidos y 125 familias damnificadas.
La noche de la tragedia
Desde el momento en que se conoció la catástrofe, el Sistema Nacional de Protección Civil se activó con todas sus instituciones operando al 100% de su capacidad y concentrando los esfuerzos en recuperar con vida al mayor número de personas posibles. Las imágenes del deslave fueron las postales con las que El Salvador amaneció el 30 de octubre en medio del asombro y dolor que causaron.

Los primeros informes de las autoridades señalaron que el deslave fue provocado por un bloqueo en las quebradas cercanas a esa zona, las cuales hicieron que la humedad se acumulara y permitiera el deslizamiento de tierra que arrasó con la comunidad. En ese momento, El Salvador estaba siendo azotado por un fuerte temporal provocado por las intensas lluvias que los fenómenos climáticos en la costa Atlántica estaban dejando en Centroamérica.
Labores de búsqueda y rescate
Fueron varios días en los que el Ministerio de Obras Públicas (MOP) se mantuvo en la zona realizando labores de limpieza para despejar la zona de los escombros que el deslave había dejado. De igual forma, Comandos de Salvamento, Cruz Roja Salvadoreña, Cuerpo de Bomberos, la Policía Nacional Civil (PNC), entre otras instituciones y organizaciones civiles, se desplegaron para las labores de búsqueda y rescate de personas.
Inicialmente, el dato era abrumador: más de 30 personas desaparecidas. Sin embargo, con el paso de los días, el número de desaparecidos se redujo a una sola persona, hasta que al final se confirmó el dato en 10 personas fallecidas. De igual forma, desde el inicio de la tragedia se habló de más de 100 familias afectadas, confirmando el dato en un total de 125.

Entrega de viviendas a familias afectadas
El Gobierno de El Salvador se comprometió rápidamente a construir viviendas para las 125 familias afectadas, incluyendo también las que perdieron sus viviendas por las tormentas Amanda y Cristóbal, sumando un total de 252 viviendas que en este mes de diciembre fueron entregadas por el presidente de la República, Nayib Bukele.
Posterior a la tragedia, Protección Civil decretó una alerta roja en la zona de Nejapa, la cual duró más de 15 días debido a las constantes lluvias que siguieron azotando a El Salvador durante ese período.
