Los resultados preliminares de las elecciones legislativas y municipales del 28 de febrero son una muestra de renovación política y del apoyo de los salvadoreños tanto en el país como en el extranjero, aseguraron Olga Noriega y Moris Gómez, dos de los miembros del partido Nuevas Ideas (NI) en Estados Unidos.
El partido unió a decenas de salvadoreños en el exterior, quienes se organizaron para buscar una transformación en la política de su país de origen, el desarrollo de sus municipios, apostar por mejores centros educativos para las futuras generaciones y aspirar a un mejor servicio de salud en los hospitales.
Que un partido que acaba de surgir termine con el bipartidismo en El Salvador es un sueño hecho realidad para Gómez y Noriega, empresarios en Estados Unidos que se involucraron desde los inicios de NI.
Gómez, quien huyó del conflicto armado en El Salvador y radica en Washington D. C. desde 1990, emitió su voto el domingo pasado, y desde que iniciaron las reuniones en el exterior para convertir el movimiento en una nueva fuerza política no se arrepiente de formar parte de la historia de Nuevas Ideas, especialmente ahora que lograron la victoria.
«Estoy contento y ahora más porque los resultados [electorales] no me los esperaba. Sabía que íbamos a obtener un triunfo, pero no así como ha ocurrido»,
Dijo el empresario Gómez.
Noriega también se vio obligada a emigrar por el conflicto armado y no fue hasta que nació el partido Nuevas Ideas que despertó su interés nuevamente en la política salvadoreña.
Esta vez espera proponer proyectos educativos, un área en la que es especialista, para que sus compatriotas en el exterior tengan la oportunidad de culminar sus estudios en línea. El proyecto aún está en discusión de forma interna, pero anhela que se convierta en realidad con las proyecciones de la toma de poder en la Asamblea Legislativa.
«Los resultados nos llenan de alegría, identificamos a candidatos que han salido seleccionados por el pueblo, valió la pena el sacrificio»,
abonó Noriega, originaria de San Miguel.
Gómez participó el domingo en la jornada electoral en uno de los centros de votación del municipio San Gerardo, en San Miguel, donde a partir de mayo gobernará el representante de Nuevas Ideas.
Por su parte, Noriega no pudo ejercer el derecho al voto por inconvenientes personales; sin embargo, sostuvo que si todos los salvadoreños en el exterior hubieran votado, la diferencia del gane del partido habría sido mayor.
«Estoy satisfecha con el trabajo que está haciendo [el Gobierno]», acotó. La propuesta de un nuevo partido les pareció interesante y se unieron al equipo de empresarios para promover esta nueva idea política en ciudades donde habitan otros compatriotas: Nueva York, Boston, Los Ángeles, San Francisco, Atlanta y Nueva Jersey.
«Buscamos a salvadoreños con deseos de cooperar en la transformación del país, ya que habíamos tenido un desencanto por tantos años por las promesas que quedaron en eso, en promesas», recordó Gómez.
Luego de los encuentros, el salvadoreño describe el crecimiento del partido como una «bola de nieve imparable».
Los empresarios salvadoreños coincidieron en que uno de los planes más exitosos para la diáspora en el país norteamericano es el Plan Control Territorial, ya que no solo lo conocen por lo que dice el Ejecutivo, sino porque durante sus visitas al país se sienten más seguros que en años anteriores.
Experimentar seguridad en su país los motiva a invitar a sus compatriotas a regresar a sus orígenes y como empresarios se convierten en referentes para atraer mayor inversión y turismo, insistieron.
«Aún falta más. El Salvador va a empezar su desarrollo. Aunque vemos que el presidente está haciendo muchas cosas, con la ayuda de la Asamblea es que vamos a saber hasta dónde podemos llegar»,
afirmó Noriega.
Otro de los temas centrales con la nueva Asamblea Legislativa es que puedan ejercer el voto en 2024 para las elecciones presidenciales. «En esta ocasión muchos pudieron ir, pero no todos tienen esa posibilidad», opinó Noriega.
Para Gómez, la confrontación entre ambos órganos de Estado llegó a su fin. «Lo que le puedo decir a la gente que aún no acepta lo que está pasando es que den tiempo. Pronto se verán esos cambios que Nayib Bukele prometió para El Salvador.
La Asamblea Legislativa estaba impidiendo muchas cosas que [el presidente] quería hacer, pero finalmente podrán trabajar mano a mano para sacar adelante al país», manifestó. Los salvadoreños también se mantienen pendientes de las reuniones para una reforma a la Constitución.