El Director General de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas se solidarizó con las familias de dos jóvenes asesinados la semana anterior en Chalatenango, al tiempo que informó sobre las capturas de dos de los pandilleros implicados en los hechos de sangre.
«En nombre de la institución policial y de la Fuerza Armada, nos queremos solidarizar con la familia de dos personas que fueron vil y cobardemente asesinadas en el cantón Guarjila y en San Antonio Los Ranchos», público Arriaza Chicas.
Las víctimas de los pandilleros son Eder Rodríguez Flores Velasco, quien era originario del cantón Los Naranjos, de Sensuntepeque, y Víctor Manuel Rivas, originario de San Antonio Los Ranchos, quienes, según los informes policiales, «fueron asesinados vil y cobardemente cuando regresaban de disfrutar de un sano esparcimiento».
Según detalló el director de la Policía, los asesinatos en perjuicio de los jóvenes fueron cometidos el 18 y el 22 de marzo por una estructura criminal que se hacen llamar «los Justicieros».
Ante varios pelotones de policías que ya fueron desplegados en los municipios de Potonico, San Isidro Labrador, San José Cancasque y San Antonio Los Ranchos, el director Arriaza Chicas presentó a los pandilleros Emmanuel Bartolo, alias el Pantera, y José Elías Ramírez, alias el Humilde, como los principales implicados en los dos asesinatos cometidos la semana anterior en Chalatenango.
«Ellos son parte de una estructura criminal de la 18S llamada los Justicieros, son los señalados e investigados y que se tienen indicios fuertes que dispararon contra los dos jóvenes, asesinados el 18 y 22 de este mes», afirmó el funcionario.
Advirtió que como institución policial y con instrucciones del Gabinete de Seguridad, especialmente del Presidente de la República, «no se va a permitir ningún indicio de estructuras criminales».
El director policial ha afirmado que en los próximos estarán en estos cuatro distritos del sur de Chalatenango, con la única finalidad de garantizar la vida y la seguridad de los bienes de los salvadoreños honrados y trabajadores que viven en este territorio.
Desde el domingo por la tarde, 5,000 soldados y 1,000 policías fueron desplegados en un cerco de seguridad en los municipios de Potonico, San Isidro Labrador, San José Cancasque y San Antonio Los Ranchos.
«También tendremos a las Fuerzas Especiales, Inteligencia e Investigaciones y a las Unidades Especializadas de Policía Canina en aquellos lugares donde obtengamos información que se distribuye droga», afirmó el director policial.