No era un déjavu, era historia real. FAS tenía la victoria en el bolsillo hasta el minuto 90, y parecía que repetiría la dósis de la fase regular, pero en el último suspiro del tiempo agregado (90+5′), Dragón sacó la última bocanada de fuego y con el 1-1 dejó abierta la serie por el boleto a semifinales del Apertura 2023. Queda la vuelta el fin de semana, en Santa Ana.
Los primeros 15 minutos sobre el césped del Juan Francisco Barraza presentaron a un Dragón «tembloroso» y cosecuentemente el miedo escénico lo volvió errático en el traslado del balón; el FAS, mientras, llevó la iniciativa y desde el control del juego generó mano a mano entre Wilma Torres del que salió bien librado el meta mitológico, Felipe Amaya.
Y después, el conjunto tigrillo, volvió a desnudar la fragilidad de la zaga dragoniana con otra incursión desde la izquierda y, posterior, centro que cortó con algunos apuros Amaya. Hasta ahí la única ofensa en ataque fue un remate de Jhon Montaño.
En el 25′, Felipe Amaya fue providencial en el achique y le sacó un gol cantado a Rudy Clavel, que se había sumado en ataque, pero solo segundos después Jairo Martínez se encontró suelto un balón en el área y decretó el 0-1 favorable a los asociados.
Al calor de la tarde migueleña, del juego y el desgaste físico, FAS quitó el pie del acelerador y fue así como Dragón logró emparejar el dominio, pero no el marcador, ya que Kevin Carabantes volvió a aparecer para atragantar el grito de gol a Montaño en el atardecer del primer acto.
En la vuelta de las duchas el juego se volvió tedioso, carente de emoción y muy cortado, sobre todo del lado de FAS que aprovechó cada falta para exagerar y robarle segundos al cronómetro, y parecía que le sacarían petróleo a la extrategia, pero Javier Fermán, en el tiempo agredo, les botó el negocio con su tanto al 90+5′.