El CEO de Binance anunció que tenía el interés de adquirir al Exchange FTX (emisor del token FTT), luego de que quedó demostrada la total iliquidez de la criptobolsa referida. Si bien era cierto, todos temían que FTX quebrara y arrastrara al resto de la criptografía.
Al parecer, FTX tenía una estrecha relación comercial con su empresa hermana Alameda Research, previamente Sam Bankman-Fried, quien fungía como CEO de FTX, reveló el trato que se maquinaba con Binance para «rescatar» el ecosistema criptográfico. A propósito de lo anterior, Changpeng Zhao, mejor conocido por el pseudónimo CZ, dejó dos cuestiones aleccionadoras vía Twitter: 1) nunca utilices un token que hayas creado como garantía; 2) no pidas préstamos si diriges un negocio de criptomonedas. No utilices el capital de forma «eficiente». Ten una gran reserva.
Más allá de sus palabras, que definitivamente parecían proféticas en el entorno macroeconómico actual, quedaba claro que Binance era el potencial dueño del 80 % del negocio de compra y venta de criptografía. Cuestión que indefectiblemente atraerá la mirada holística de los reguladores antimonopolio, así como cuando Rockefeller fundó la antiquísima Standard Oil, de la cual todavía sobrevive Exxon Mobile como última petrolera de aquel imperio desmembrado.
Este evento denota que todavía existen grandes riesgos a través de este mercado bajista, y no hay garantías de que FTX sea la última víctima de esta parte del ciclo económico contractivo. El cisne negro en comento podría tumbar el precio del bitcóin cerca de los $10,000 o menos. Lo anterior se refuerza con las expectativas de tipos federales de la FED en Estados Unidos, que apuntan a una tasa terminal superior al 5 %. Téngase en cuenta que todos los ciclos de políticas económicas contractivas terminaron cuando los tipos federales rebasaron a la inflación. Para fines prácticos, eso sería elevar los tipos de interés aproximadamente arriba del 9 %, tomando en cuenta cifras actuales del PCE subyacente.
Para poner en contexto lo anterior, la inflación remitirá cuando haya una recesión bastante profunda. Si bien es cierto ya nos encontramos en medio de una recesión técnica, no es menos cierto que los niveles de empleo actuales aún no demuestran el verdadero dolor. Lamentablemente, la medicina para la inflación suele ser amarga, contrario al QE.
Milton Friedman planteó que la única solución contra la inflación era subir los tipos de interés, puesto que la absorción de la masa monetaria en la economía real (en la compra del pan, frijoles, maíz, zapatos, ropa, gasolina) tenía como efecto inflación. Hoy nos encontramos en plena estanflación = estancamiento y elevada inflación, cuestión que no hará más que abaratar el precio de las criptomonedas. Sin embargo, hoy es cuando debe mirarse el panorama y poner las cosas en perspectivas para construir una cartera de inversión duradera.
Nadie conoce el futuro, pero estoy seguro de que el actual mercado bajista no será eterno.