La ministra de Relaciones Exteriores, Alexandra Hill Tinoco, lideró la representación de El Salvador que participó en la III Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la CELAC-UE, encuentro que tiene lugar en Bruselas, Bélgica.
En este espacio, la ministra expuso cómo El Salvador ha vivido un proceso de transformación social y de desarrollo desde el año 2019, con la llegada a la presidencia de Nayib Bukele. Hill hizo énfasis en que este proceso ha garantizado al país la recuperación de su soberanía y la posibilidad de ofrecer una mejor calidad de vida a los salvadoreños.
«Emprendimos un esfuerzo histórico e inédito de transformación política, económica y social, orientado a resolver de manera valiente, los problemas estructurales que, por décadas, estancaron el progreso del país. A partir de estos cambios, muchos socios en la región de las Américas reconocen con firmeza que las iniciativas estratégicas impulsadas en este proceso pueden aportar a construir una región más próspera, segura y en paz», aseguró.
«Este nuevo país, obedece a la estrategia de justicia y seguridad impulsada por el Gobierno de El Salvador implica el mejoramiento de la educación, la salud, el desarrollo económico, la atención a la primera infancia, áreas esenciales para lograr el verdadero desarrollo de nuestro país y el derecho del pueblo salvadoreño a transformar su forma de vida y cambiar el curso de la historia hacia un Estado de bienestar y progreso», agregó.
De igual forma, Hill remarcó que El Salvador tiene toda la disposición de trabajar con otras naciones para que puedan generar un proceso transformador dentro de sus territorios, siempre priorizando el respeto a la soberanía de cada Estado.
«El Salvador está abierto a trabajar de la mano con sus socios, amigos y aliados que estén dispuestos a privilegiar una relación de respeto mutuo, de manera constructiva y de beneficio común para nuestras sociedades», aseguró.
En este punto, la ministra dijo que debe existir un diálogo birregional y un fortalecimiento entre las naciones, principalmente ante los retos del contexto social y económico actual en todo el mundo.
«Solo así podremos construir verdaderos avances en las prioridades definidas para nuestra agenda común, la cual debe afrontar los desafíos derivados del cambio climático, la transformación digital, el comercio e inversiones, el desarrollo sostenible, la seguridad ciudadana y la justicia social», aseguró.