El Salvador solo representa el 2.5 % de las aprehensiones en la frontera suroeste entre México y Estados Unidos, de lo que va el año fiscal de 2023, que comprende de octubre de 2022 a abril del corriente año, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, en inglés).
De 1,431,964 encuentros de todos los países, El Salvador reportó 35,299. Arriba de El Salvador se encuentran naciones como México (31.2 %), Cuba (8.1 %), Colombia (7.5 %), Guatemala (7.0 %), Venezuela y Nicaragua (6.7 %), otros (6.6 %), Honduras (6.2 %), Ecuador (4.5 %) , Perú (3.8 %) y Haití (2.8).
El recuento deja a El Salvador en la posición 12 de la lista de las aprehensiones. Al comparar las detenciones de abril de 2022 y las del 2023, las estadísticas muestran que hubo una baja del 39.2 %, ya que el año pasado la CBP registró 8,355 arrestos, mientras que este abril fueron 4,626.
El Gobierno de El Salvador atribuye este esfuerzo a la aplicación de oportunidades de empleo en el exterior, con la inscripción en el programa de Movilidad Laboral, y a las medidas en seguridad y combate a las pandillas, como la aprobación por décima cuarta vez del régimen de excepción por 30 días más, el 16 de mayo en la Asamblea Legislativa.
La viceministra de Diáspora y Movilidad Humana, Cindy Mariela Portal, manifestó que desde el Ministerio de Relaciones Exteriores continuarán promoviendo los programas que ponen como prioridad las necesidades de los salvadoreños, tanto en el país como fuera de las fronteras.
El martes pasado, el director de Diáspora y Desarrollo, Gerardo Pérez, se reunió con representantes del Consejo Nacional de Empleadores Agricultores (NCAE, por sus siglas en inglés), y United Work & Travel, con el objetivo de generar más fuentes de empleo con el programa de Movilidad Laboral, con el que ya impulsaron a más de 5,000 personas.
En cuanto a seguridad, El Salvador pasó de ser uno de los países más violentos en Latinoamérica a uno con menos homicidios por día. Honduras y Costa Rica han impulsados planes de seguridad en la región, pero lo han logrado reducir las cifras de asesinatos y otros delitos.
BLOQUEOS EN LA FRONTERA
La frontera se convirtió en escenario de caos entre abril y lo que va de mayo, con la esperada suspensión de las expulsiones inmediatas con el Título 42, el 11 de mayo. Sin embargo, la administración de Joe Biden enfatizó que todos los migrantes que lleguen de manera irregular sin una cita previa para presentar su caso de asilo o que no hayan intentado protegerse en otro país y se le hayan negado, serán sometidos a una deportación con el Título 8. Una vez detenidos tendrán que comprobar que su caso es excepcional, de lo contrario serán deportados a sus países de origen, a excepción de Haití, Venezuela, Cuba y Nicaragua, que tendrán que quedarse en México.
El Gobierno mexicano reiteró que solo recibirá 1,000 migrantes deportados por día «porque no hay capacidad para más», aseguró el canciller Marcelo Ebrad.
A una semana del levantamiento del Título 42, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), publicó que los albergues para migrantes en el sur y en Ciudad de México ya estaban saturados. «Además de las personas que están llegando desde el sur, algunos albergues ya han recibido a personas venezolanas deportadas desde Estados Unidos», compartió.
«Quienes no tienen información sobre su proceso, enfrentan carencias en la capacidad de recepción en México e incertidumbre sobre su situación legal o migratoria», divulgó ACNUR.