Hoy en día el cacao es utilizado en la industria, la cosmetología y el consumo masivo de productos como manteca, pasta, licor de cacao y en bebidas, chocolates y dulces.
El cacao ocupa el tercer lugar después del azúcar y el café en el mercado mundial de materias primas, por lo que El Salvador está apostando a dinamizar el rubro, que por mucho tiempo estuvo dormido.
Las bases de datos del Banco Central de Reserva (BCR) indican que el país distribuyó más de 8 millones de kilogramos, $4.6 millones, en la comercialización del grano desde 2016 hasta lo que va de 2021.
El BCR informó que, hasta junio de este año, países como Estados Unidos ($48,305), Guatemala $1,340), Costa Rica ($11,020) e Italia ($11,636) han comprado más de 19,283 kilogramos, valorados en $79,147.
El cacao criollo, una de las variedades que produce el país, mantiene una alta demanda ya que posee un aroma muy fino, buen sabor y pureza. Además, los chocolates elaborados con esta variedad pueden costar hasta 12 veces más que lo normal.
INNOVACIÓN DE LAS MYPES DE CACAO
Camila Sandoval, ingeniera agroindustrial de Alianza Cacao, explicó que como organismo antes de la pandemia se trabajó en la innovación de las micros y pequeñas empresas (mypes) del rubro del cacao.
Durante la pandemia, Alianza Cacao contribuyó en la migración digital de las mypes, no solo en crear redes sociales, sino en propiciar la calidez humana mediante una pantalla; de manera que se atienda al cliente con un mejor servicio.
En ese contexto, para dinamizar la cadena de valor, la institución se centró en el efecto de cascada benéfica, con lo que se proporcionaron asesorías técnicas tanto en la producción del chocolate como en administración empresarial. Con esto, la intención es tener más clientes e incrementar la producción.
Según explicó la experta, el 80 % del cacao producido en El Salvador atendido por Alianza Cacao ahora tiene por destino final las mypes, las relaciones entre comprador y vendedor, que también están incrementando; mientras que el 20 % adicional está disperso y es consumido por los productores que tienen pocos volúmenes y no son comercializables.
«En los últimos meses se ha trabajado para que las empresas que tenían años en el mercado y estaban consumiendo cacao de importación migraran al cacao nacional», explicó la experta.
Sandoval indicó que las mypes deben migrar hacia lo digital con una imagen atractiva que propicie la relación con los clientes y se adecue a las redes sociales que sean capaces de manejar. «Las redes sociales y la parte tecnológica son una herramienta de forma, pero lo principal es llegar al cliente», dijo.
En los últimos años, las mypes que comercializan cacao han aumentado en un 150 % la venta a los compradores de grano, según explicó la Alianza Cacao, por lo que buscan que esto incremente en los próximos años.
«A pesar de la pandemia y de las lluvias del año pasado, el rubro chocolatero no dejó de vender, no cayeron tanto las ventas, ya que se seguía una buena estrategia de posicionamiento»
CAMILA SANDOVAL, INGENIERA AGROINDUSTRIAL DE ALIANZA CACAO